La inmigración ilegal en Estados Unidos es uno de los temas que más preocupa tanto al gobierno federal como a los líderes estatales y ahora las autoridades comenzaron a notar otra práctica por parte de los extranjeros que ingresan al país de forma indebida que alerta a las comunidades. Recientemente, una extraña situación ocurrió en la frontera sur, cuando la Patrulla Fronteriza encontró que una pareja oriunda de California viajó con dos hijos hacia México y quiso volver a EU con cuatro.
Según detallaron funcionarios de la fuerza de seguridad, Laura Aracely Rodríguez y Cristian Vélez Gutiérrez habían aprobado la inspección en el puerto de entrada estadounidense de Calexico, cuando agentes fronterizos los detuvieron en un puesto de control táctico en una carretera cerca de Westmoreland, en el Estado Dorado.
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¿Qué pasó con la Patrulla Fronteriza?
La policía frenó su vehículo y pidió las identificaciones de cada uno, además de consultarle por el propósito del viaje. Rodríguez presentó una tarjeta de pasaporte estadounidense y Vélez una Green Card. La pareja dijo que conducía para ir de compras, pero el agente observó que en la parte de atrás del coche viajaban un adolescente y tres niños. Al ser interrogados por los menores, ambos respondieron que eran sus hijos.
Sin embargo, al notar que Vélez empezó a tartamudear y a mirar hacia otro lado mientras la mujer respondía las preguntas, el oficial decidió enviarlos a un área de inspección secundaria. Allí, los agentes fronterizos entrevistaron al niño mayor y fue él quien les dijo a las autoridades que la señora lo llevaba en auto para reunirlo con sus padres.
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¿Qué pasó con los niños y dónde están ahora?
Los funcionarios interrogaron a Rodríguez y ella admitió que recogió a los dos niños varones de una mujer en Mexicali, México, y que le pagarían 6,000 dólares por entregarlos a una dirección no revelada en Indio, California.
La mujer, según el expediente judicial, había cruzado a los dos menores mexicanos al Estado Dorado con los documentos de identidad de sus propios hijos. La estrategia funcionó en el cruce, ya que sus pequeños estaban dormidos cuando pasaron por una cabina de inspección de Aduanas y Protección Fronteriza de EU, por lo que no fueron interrogados.
Un juez federal fijó el 26 de agosto como fecha para el juicio, mientras Rodríguez está acusada de contrabando de dos niños mexicanos a través de la frontera. Por el momento, los menores fueron puestos bajo custodia de inmigración, aunque el adolescente pasó a ser testigo del caso.