Los esfuerzos del gobierno de Estados Unidos por disminuir el ingreso de migrantes indocumentados por la frontera con México está dando resultados. Sin embargo, el panorama de la ola migratoria podría cambiar tras las elecciones presidenciales del próximo noviembre. ¿Cuáles son las razones? Te lo contamos.
El pasado 4 de junio, el presidente de EU, Joe Biden, ordenó la suspensión de la entrada de extranjeros que cruzaran la frontera sur de manera ilegal y restringió el acceso a solicitudes de asilo. La medida entró en vigor inmediatamente y facilitó que los oficiales de inmigración empiecen a expulsar rápidamente a personas que no tenían una base legal para permanecer en Estados Unidos.
Al mismo tiempo, México empezó a implementar una serie de medidas para evitar que cada vez más migrantes lleguen a la frontera estadounidense, lo que está reduciendo el número de detenciones y deportaciones.
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¿Qué pasa en la frontera de México con Estados Unidos?
Según las últimas cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), desde que entró en vigencia la medida que anunció Biden, se registra una disminución “continua y significativa” en los cruces fronterizos ilegales, incluida una disminución de más del 55% en los encuentros entre los puertos de entrada a lo largo de la frontera suroeste.
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Desde entonces, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) también ha triplicado el porcentaje de migrantes indocumentados procesados para deportación acelerada, y el número de personas liberadas por la Patrulla Fronteriza en espera de procedimientos judiciales de inmigración ha disminuido un 80%.
El DHS expulsó o devolvió a más de 160,000 personas a más de 145 países desde el 5 de junio, sin incluir las repatriaciones de la CBP de personas encontradas en aeropuertos o en la frontera norte.
¿Regresa la ola migratoria tras las elecciones de EU?
Los esfuerzos que hace México, por su parte, provocan que caravanas de migrantes se concentren en ciudades del sur del país, en la frontera con Guatemala.
Localidades como la sureña Tapachula se están convirtiendo en bombas de tiempo que están por explotar, especialmente porque todos los albergues están a reventar y cada vez más personas buscan la manera de seguir avanzando hacia el norte.
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Se conoce que México sigue cumpliendo su parte de un acuerdo con EU, cuyos términos no se han difundido al detalle, al retener a los migrantes al sur del país, al menos hasta el 5 de noviembre próximo, cuando, quien gane las elecciones, podría enfrentarse a la llegada de una nueva ola.
