Próximamente, los inmigrantes indocumentados deberán responder sobre su estatus en los hospitales de Texas. Esta nueva medida fue anunciada por el propio gobernador, Greg Abbott, al abogar que los residentes nativos del estado “no deberían tener que soportar la carga de apoyar financieramente” la atención médica para extranjeros sin documentación.
En agosto, el mandatario republicano firmó una orden ejecutiva en la que se requiere que los centros de salud públicos del Estado de la Estrella Solitaria realicen un monitoreo del estatus migratorio de los pacientes que atiendan. El objetivo es, según explicaron las autoridades, que el costo de atención de los extranjeros indocumentados se derive al gobierno federal para un reembolso.
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De esta manera, Abbott le solicitó a la Comisión de Salud y Servicios Humanos de Texas (HHSC, por sus siglas en inglés) recopilar información sobre los inmigrantes ilegales que utilizan los hospitales estatales para recibir atención de emergencia y para pacientes internados.
¿A partir de cuándo pedirán información a inmigrantes indocumentados?
En la actualidad, quienes trabajan en los hospitales públicos de Texas no preguntan el estatus migratorio de sus pacientes, pero a partir del 1 de noviembre del 2024 deberán hacerlo. Asimismo, los centros de salud con cobertura directa tendrán que informar los datos a la HHSC estatal de forma trimestral a partir de marzo del 2025.
“Debido a las políticas de apertura de fronteras del presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris, el estado ha tenido que hacerse cargo de los costos médicos de las personas que se encuentran ilegalmente aquí", apuntó Abbott en un comunicado, al anunciar esta decisión.
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Por su parte, la portavoz de la Asociación de Hospitales de Texas, Carrie Williams, señaló que “los hospitales están obligados por ley a proporcionar un tratamiento vital a cualquier persona, independientemente de su capacidad de pago o estatus”.