La inspección vehicular anual en Texas está por desaparecer definitivamente el año que viene, tras permanecer mucho tiempo como un requisito fundamental para los conductores. A partir del miércoles 1 de enero del 2025, los coches no comerciales en gran parte del estado ya no deberán pasar esta revisión para completar su registro.
Sin embargo, serán varios los casos de conductores que no estarán exentos de las regulaciones, dado que en muchos condados se mantendrá la obligatoriedad de las pruebas de emisiones. Descubre a continuación cómo será la situación en tu región desde el año que viene.
Los condados de Texas que tendrán pruebas de emisiones obligatorias
Aunque el estado eliminará la inspección general, 17 condados mantendrán las pruebas de emisiones debido a problemas de calidad del aire. Esto afectará a un gran número de conductores texanos que deberán someterse a este proceso para evitar multas y sanciones futuras.
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Los condados del Estado de la Estrella Solitaria que mantendrán estas inspecciones en el 2025 son:
- Harris
- Fort Bend
- Galveston
- Montgomery
- Brazoria
- Collin
- Dallas
- Denton
- Ellis
- Johnson
- Kaufman
- Parker
- Rockwall
- Tarrant
- Travis
- Williamson
- El Paso
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Además, a partir del 2026, el condado de Bexar, que abarca San Antonio, también se unirá a esta lista. Esto tiene que ver con un compromiso continuo con la mejora de la calidad del aire en estas regiones.
¿Qué significa para los conductores de Texas?
Para los residentes fuera de los condados mencionados, el proceso será más simple y económico. Solo deberán pagar una tarifa adicional de 7.50 dólares junto con su registro anual, al eliminar el costo y el tiempo de la inspección vehicular.
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En contraste, quienes vivan en los condados con pruebas de emisiones deberán planificar sus registros con este requisito en mente. Según el Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS, por sus siglas en inglés), estas pruebas serán rápidas y con tiempos de espera reducidos.