Tener una vivienda propia se ha hecho cada vez más difícil en Estados Unidos y la situación no hace más que empeorar. En octubre del 2021, aproximadamente la mitad de los estadounidenses (49%) afirmó que acceder a una propiedad en su comunidad era un problema importante, un aumento de 10 puntos porcentuales con respecto a principios del 2018, según datos del Pew Research Center.
En la misma encuesta del 2021, el 70% de los estadounidenses afirmaron que los adultos jóvenes tienen más dificultades para comprar una vivienda que la generación de sus padres.
Tener vivienda propia en Estados Unidos
Son múltiples los factores que han provocado que los propietarios e inquilinos estadounidenses enfrenten problemas dentro del mercado inmobiliario en los últimos años. Esto se debe a que, según un análisis de Pew, los ingresos no han seguido el ritmo de los aumentos de los costos de la vivienda y ha habido una desaceleración de la construcción de los hogares.
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“Un aumento en la compra de viviendas impulsado por tasas de interés hipotecarias históricamente bajas durante la pandemia de Covid-19 ha tensado aún más la disponibilidad de viviendas”, señaló el centro de investigación.
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¿Por qué es más difícil comprar una vivienda en EU?
Ahora la realidad se ha vuelto más complicada. Después de alcanzar máximos de dos décadas cercanos al 8% a finales del año pasado, las tasas hipotecarias cayeron, al bajar casi hasta el 6% en septiembre.
Sin embargo, esas tasas han ido subiendo desde ese mes hasta alcanzar el 6.84% para una hipoteca estándar a 30 años, según explica CNN.
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Se espera que las tasas hipotecarias se mantengan por encima del 6% durante al menos los próximos dos años, según economistas y pronósticos recientes, lo que significaría que el panorama se mantendría muy complejo para quienes desean adquirir una casa propia.
Las ventas de viviendas están en camino de tener su peor año desde 1995, debido al alza de los precios y las tasas hipotecarias elevadas.