La velocidad excesiva, las distracciones en la carretera o factores externos son algunos de los principales motivos que desencadenan accidentes de auto. Las autoridades de Estados Unidos y de todo el mundo emplean esfuerzos por concientizar a los conductores sobre los riesgos que pueden significar para la población y un estudio reveló qué ocasiona el 10% de los percances al volante.
En el 2023, 41,000 personas murieron en accidentes de tránsito en EU, según las cifras de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés). Este dato significó una disminución del 3.6% con respecto al año anterior.
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Un informe realizado por investigadores australianos y liderado por el profesor Stephen Robinson reveló que el 10% de los accidentes de auto son producidos por la somnolencia. El cansancio o la fatiga al volante desencadenaron situaciones en la carretera, que derivaron en un susto repentino o en desenlaces fatales.
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¿Por qué aparece la somnolencia al volante?
El informe indicó que las vibraciones naturales de un vehículo pueden provocar sueño a los 15 minutos de haber iniciado el viaje. Además, a la hora de emprender el camino se presenta el mayor riesgo de somnolencia, mientras que con la mitad del tiempo pueden aparecer síntomas de desconcentración y distracciones.
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“Sabemos que uno de cada cinco australianos se ha quedado dormido al volante y que conducir con sueño es un problema importante para la seguridad vial”, detallaron.
Recomendaciones de los expertos en los accidentes de tránsito
Ya sea para emprender un viaje largo de vacaciones o un breve recorrido para ir al trabajo, la NHTSA compartió una serie de recomendaciones para reducir el riesgo a sufrir un accidente de auto por somnolencia. Estas son:
- Tratar de dormir lo suficiente, al menos ocho horas la noche previa a conducir.
- Si has tomado algún tipo de medicación, revisa las etiquetas e indicaciones.
- Conduce en horas en las que normalmente estés despierto y evita realizar un viaje a medianoche o de madrugada.
- Si se trata de un recorrido largo, es aconsejable hacer paradas cada dos horas o cada 200 kilómetros.