El actor canadiense Ryan Reynolds, conocido por su humor irreverente y sus papeles en películas como Deadpool, ha sorprendido nuevamente al mundo al compartir su visión sobre la paternidad. En diversas entrevistas, Reynolds ha enfatizado su deseo de ofrecer a sus hijos una vida lo más normal posible, alejada de los focos y los excesos propios del mundo del espectáculo.
Casado con la actriz Blake Lively y padre de cuatro hijos, Reynolds ha reconocido que es consciente de los privilegios que tienen sus pequeños.
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Ryan Reynolds quiere que sus hijos tengan una vida normal
El protagonista de ‘Deadpool’ es padre de cuatro hijos con su esposa Blake Lively, James de nueve años, Inez de ocho, Betty de cinco, y su hijo Olin, que nació en 2023, y ha revelado que intenta que se sientan agradecidos a pesar de que su lujosa educación es completamente diferente a cómo fueron criadas las estrellas.
Ryan Reynolds enviaba a Blake Lively un ramo de flores una vez a la semana mientras eran novios
En declaraciones a The Hollywood Reporter, indicó: “Intentamos darles una vida lo más normal posible. Intento no imponerles la diferencia entre su infancia y la mía o la de mi mujer. Ambos crecimos en una clase muy trabajadora, y recuerdo que cuando eran muy pequeños, solía decir o pensar algo así como: ‘Oh Dios, nunca hubiera tenido un don como este cuando era niño’, o: ‘Yo nunca habría tenido este lujo de conseguir comida para llevar’, o lo que sea. Luego me di cuenta de que eso no es realmente lo que tienen que cargar”.
Y añadió sobre los niños: “Ya están muy en contacto con la gratitud y la comprensión del mundo lo suficiente como para tener un fuerte sentido de la empatía. Esas son las cosas que creo que indican que estamos haciendo un buen trabajo, si nuestros hijos pueden empatizar con otras personas y con otros niños. Pero sí, es diferente. Cuando yo era niño, te aguantabas, salías de casa y volvías al atardecer, pero ahora ni me lo imagino”.
¿Cómo fue la infancia de Ryan Reynolds?
Ryan admitió recientemente que tenía una relación “muy complicada” con su padre.
El actor de 48 años se crió en un “hogar de obreros” y recuerda a su padre, que falleció en 2015, tras una batalla de 20 años contra la enfermedad de Parkinson, comunicándose a través de “simples gruñidos”.
Así lo dijo a Variety: “Mi relación con mi padre era muy complicada. Vengo de un hogar de clase media, de cuello azul, y mi padre era de esa generación de Clint Eastwood. Con simples gruñidos es como se comunicaba”.
Sin embargo, en los últimos años, Ryan ha reevaluado su relación con su padre, y añade: “La gente se cuenta historias a sí misma, y a medida que crecemos tenemos la responsabilidad de cuestionarlas un poco. Yo lo he hecho un poco más en los últimos cinco años; no me conocí a mí mismo hasta que tuve unos 40 años. Me lo pregunto a menudo: '¿Era mi padre tan desafiante como me gusta pensar? O lo estoy idealizando para tapar todas esas otras cosas que no quiero ver’. La historia no es cierta; nadie es blanco o negro de esa manera”.
