El debate sobre si eliminar o mantener los cambios de hora se intensifica cada año en Estados Unidos. Un grupo bipartidista de senadores impulsa la Ley de Protección de la Luz Solar, que busca hacer permanente el horario de verano (DST, por sus siglas en inglés), con el argumento de que las tardes más duraderas mejorarían la salud pública y la economía a mediano y largo plazo.
Sin embargo, y pese a que esta postura toma mayor consenso con el tiempo, ciertas personas abogan por la opción de que el horario permanente sea el estándar, tal y como ocurre en Hawái o Arizona. El principal argumento detrás de esta postura tiene que ver con el ritmo biológico humano.
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Por otro lado, hay quienes afirman que lo ideal es seguir como hasta ahora, con los ajustes a los relojes dos veces por año, en marzo y noviembre.
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Las opiniones sobre mantener el horario de verano para siempre en EU
Uno de los puntos más discutidos es cómo el cambio de hora afecta la salud. Los defensores del horario de verano permanente sostienen que más luz diurna podría mejorar el sueño y reducir problemáticas como la depresión estacional. Sin embargo, diversos estudios han demostrado que una hora extra de luz vespertina podría reducir el descanso en 19 minutos promedio, lo que afectaría a la calidad del descanso.
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La Academia Estadounidense de Medicina del Sueño se posiciona a favor del horario estándar permanente. Su principal argumento radica en que en el momento de modificar las manecillas, las personas pueden sufrir “desajustes circadianos” y elevar el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y otros problemas de salud.
Posibles consecuencias de mantener el horario de verano
Aquellos que impulsan la idea de mantener el horario de verano permanente sugieren que extender la luz diurna podría reducir el consumo de energía. No obstante, los expertos expusieron resultados contradictorios y algunos señalan que se incrementaría el uso de electricidad.
En cuanto a la seguridad vial, otro de los puntos claves del debate, investigaciones indican que los accidentes de tráfico aumentan tras el cambio al horario de verano debido a la pérdida de sueño. Esto sugiere que el horario estándar podría ser más seguro para conductores y peatones.
