Tras conocerse en enero que California ocupa el primer puesto por cuarto año consecutivo en cuanto al mayor número de personas nativas que lo abandonan, los destinos más elegidos para mudarse siguen siendo dentro de Estados Unidos y uno de ellos es Texas, no solamente para sus residentes sino también para las industrias.
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Según detalló el medio Forbes, hay informes publicados recientemente donde se muestra que, de 2010 a 2019, Texas lideró la nación en creación de empleo gracias a la reubicación de empresas. En ese sentido, el estado californiano quedó primero como el territorio norteamericano con más pérdida de empleos.
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¿Por qué Texas logró ser un estado ideal para la industria?
El modelo económico de ciudades como Dallas, Houston y Austin, con impuestos bajos y una regulación estatal sencilla, fueron clave para la atracción directa de las empresas al estado. Es así que el Banco de la Reserva Federal de Dallas confirmó que Texas fue un imán para las distintas compañías y la diferencia entre la inmigración y la emigración se amplió en los años previos a la pandemia.
En una década, más de 25,000 empresas y 281,000 empleos se trasladaron a Texas desde otros estados. Según el estudio, en términos netos, el estado de EU ganó 7,232 empresas y casi 103,000 empleos.
Durante este período, ocupó el segundo lugar en negocios netos creados, detrás de Florida, y el primero en empleos netos creados, por delante de Florida, Georgia, Michigan y Arizona. Mientras que California, Nueva York y Nueva Jersey tuvieron las mayores pérdidas netas de empleo. Se calcula que más de 44,000 puestos de trabajo salieron de California hacia Texas y solo 14,700 se trasladaron en sentido contrario.
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A raíz del estudio, se conoció también que los empresarios y trabajadores abandonaron los estados mencionados por ser altamente regulados y con altos impuestos para buscar el éxito en Texas, un territorio con impuestos más bajos, viviendas más baratas y un clima empresarial en general más amigable.
El análisis de la Reserva Federal de Dallas demostró además que las empresas que se mudaron eligieron principalmente Dallas o Houston. Ambas áreas metropolitanas ganaron más de 80,000 empleos gracias a las reubicaciones entre 2010 y 2019.