Trump Tower en Chicago, uno de los rascacielos más notorios de la ciudad, se ha visto envuelto en una polémica inesperada. A pesar de ser un ícono arquitectónico y un símbolo de modernidad, el edificio enfrenta serios problemas legales que capturaron la atención del público y de las autoridades. Un reciente fallo judicial reveló cuestiones ambientales graves relacionadas con su construcción y operación.
El juez Thaddeus L. Wilson, del Tribunal de Circuito del Condado de Cook, dictó una decisión que afecta profundamente al proyecto. El edificio fue acusado de operar sin el permiso ambiental estatal necesario, una infracción que ha desencadenado una serie de demandas por parte del fiscal general de Illinois, Kwame Raoul, y diversas organizaciones dedicadas a la protección del medio ambiente.
Los demandantes también señalaron que causó la muerte de miles de animales acuáticos debido a su sistema de refrigeración. Este impacto ambiental generó una gran preocupación en la comunidad y subraya la importancia de cumplir con las normativas ecológicas en grandes desarrollos urbanos.
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¿Qué leyes infringió este histórico edificio?
La Trump Tower enfrenta serias acusaciones por violar varias leyes ambientales que protegen el río Chicago.
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A continuación, te contamos los principales problemas que genera este emblemático rascacielos:
- Operar sin permiso ambiental: esto es un requisito obligatorio para cualquier estructura que interactúe con cuerpos de agua.
- Descargas de agua incorrectas: no reportó con precisión los niveles de descarga de agua, lo que incumple las normativas de control ambiental.
- Violación de leyes públicas: la torre interfiere con el derecho público a disfrutar de actividades recreativas en el río, lo que se considera una “molestia pública” bajo la ley de Illinois.
- Daños a la fauna acuática: organismos acuáticos fueron dañados o absorbidos por el sistema de refrigeración del edificio.
La demanda presentada en el 2018 por organizaciones como Friends of the Chicago River y Sierra Club mantuvieron a la torre bajo presión legal desde entonces, con audiencias adicionales por venir.
¿Cómo se resolverá esta polémica que enfrenta el rascacielos?
La popular torre de Donald Trump sigue envuelta en problemas legales, y la próxima audiencia está programada para noviembre. Si no se llega a un acuerdo entre las partes, se llevarán a cabo más audiencias para definir las medidas necesarias que obliguen al edificio a cumplir con la ley.
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Jack Darin, director de Sierra Club Illinois, aseguró: “Estaremos monitoreando para asegurarnos de que cumplan con la ley”, lo que mostró firmeza en la búsqueda de justicia ambiental. Esta batalla aún no tiene un final claro, pero los defensores del medio ambiente están decididos a proteger el río Chicago y responsabilizar a los infractores.
