La creciente movilización de migrantes ilegales a través de la frontera norte de Estados Unidos está generando preocupación en el país y especialmente en Dakota del Norte, que se ve especialmente afectada por esto.
Drew Wrigley, fiscal general republicano del estado, advirtió que los flujos de migración ilegal que se han acelerado bajo la administración de Joe Biden continuarán y advirtió que “lo peor está por venir”.
Esta postura fue expresada durante una audiencia en la ciudad de Grand Forks, parte de una sesión del Subcomité Judicial de la Cámara de Representantes, sobre la integridad y seguridad de la ley de migración.
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La crisis de migrantes en Dakota del Norte
Durante la audiencia titulada “La crisis fronteriza de Biden: perspectivas de Dakota del Norte”, se discutieron los efectos negativos de los cruces ilegales en las comunidades locales.
Allí, Wrigley destacó que el estado, con sus 18 puertos de entrada a lo largo de 310 millas de frontera (más de 498 kilómetros), se encuentran sintiendo la presión del aumento en la presencia de migrantes, especialmente latinos.
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En el pasado año fiscal, se registraron 4,444 encuentros de migrantes en la frontera. Esto representa un aumento significativo comparado con los 2,127 del 2022 y los 548 que se hicieron presentes en el 2021.
“Estamos viendo un incremento en los crímenes callejeros y la violencia”, afirmó Wrigley, señalando a la migración como desencadenante de estos actos. Además, subrayó que la situación actual es insostenible y que las políticas del presidente Biden están fallando en cerrar la frontera de manera efectiva.
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Por su parte, el sheriff del condado de Cass, Jesse Jahner, también testificó y responsabilizó al crecimiento migratorio de traer consigo un aumento en el tráfico de narcóticos, sobredosis y delitos relacionados con la salud mental.
“Estos cambios están ejerciendo enormes presiones sobre nuestra infraestructura de seguridad pública”, remarcó Jahner de forma contundente y señaló que la capacidad carcelaria está siendo especialmente afectada.
El problema con el tráfico de drogas
Uno de los principales puntos tratados en la asamblea fue justamente al que hizo referencia el Sheriff Jahner: el aumento en el tráfico de drogas, especialmente opioides sintéticos como el fentanilo.
Wrigley destacó que estos narcóticos, que pueden costar tan solo 25 centavos por pastilla en la frontera suroeste, son vendidos en Dakota del Norte por precios de entre 60 y 80 dólares por unidad.
