Un reciente informe reveló que cientos de agentes de la frontera entre México y Estados Unidos están siendo investigados por estos delitos graves y esta situación alertó al gobierno nacional por el trabajo que lleva adelante la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), una de las agencias policiales más grandes del mundo.
Un estudio llevado a cabo por el medio Newsweek dio a conocer que al menos 211 oficiales fronterizos estadounidenses están bajo investigación por presunta mala conducta, incluido tráfico, soborno y agresión sexual. Según explicaron, todos los casos son examinados por la propia Oficina de Responsabilidad Profesional (OPR, por sus siglas en inglés) de la CBP y se refieren a personal en servicio, pero esta medida ha despertado críticas por el futuro de estas acusaciones.
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¿Cuáles son los delitos graves que habrían cometido agentes de la CBP?
Hasta el momento, los documentos revelaron 17 presuntos casos de violencia doméstica, 11 casos de agresión sexual y 10 casos de tráfico de migrantes a través de la frontera. Asimismo, otros 11 agentes están siendo investigados por malos tratos físicos a un detenido, mientras que 13 están acusados de asociación con bandas criminales.
“La CBP no tolera la mala conducta. Cuando descubrimos cualquier supuesta o posible mala conducta, la remitimos inmediatamente para su investigación y cooperamos plenamente con cualquier investigación penal o administrativa. Las investigaciones se llevan a cabo exhaustivamente y con la supervisión adecuada, al asegurar que se puedan tomar las medidas apropiadas cuando sea necesario, incluido el trabajo con las autoridades encargadas de hacer cumplir la ley”, dijo un portavoz de la agencia.
Sin embargo, esta “mala conducta” de algunos oficiales podría ser más grave, ya que se analizan acusaciones de crímenes contra niños.
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¿Cuáles son las críticas a la investigación?
Este informe, que demostraría presuntas irregularidades en el año fiscal 2023-2024, provocó pedidos de una investigación del FBI. En ese sentido, el representante demócrata Raúl Grijalva dijo al medio que el número de agentes acusados de una gran variedad de transgresiones “es extremadamente preocupante”.
Pero el asambleísta apuntó contra quienes analizan estos casos. “Si los informes de que las investigaciones están siendo dirigidas por la Oficina de Responsabilidad Profesional de CBP son ciertos, me preocupa la integridad de las investigaciones. Podrían estar en riesgo”, expresó.
“La OPR no es una unidad de investigación independiente; está formada por compañeros agentes de la CBP, muchos de los cuales han abusado de sus posiciones de confianza y han sido recontratados o reasignados. Es bien conocida por su historial de encubrimientos. Insto al secretario Alejandro Mayorkas y la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional para que la Oficina Federal de Investigaciones investigue a estos agentes”, sentenció.
