Gracie Abrams, la cantautora que cautivó a millones durante “The Eras Tour” como telonera de Taylor Swift, se ha sincerado sobre esta experiencia transformadora. En una reciente entrevista, la joven artista comparó su tiempo en la gira con asistir a la universidad de la música.
La gira de Swift, que batió récords de asistencia, proporcionó a Abrams una plataforma sin precedentes para dar a conocer su música.
Te interesa: ¿Quién es Joe Alwyn, el exnovio de Taylor Swift del que tanto se habla?
Gracie Abrams fue telonera de Taylor Swift en ‘The Eras Tour’
Gracie Abrams tomó la decisión consciente de “observar y aprender” de Taylor Swift durante todo el ‘Eras Tour’.
La cantante, de 25 años, actuó como telonera en la gira de Taylor, que batió récords, y disfrutó aprendiendo de la estrella del pop.
Taylor Swift protagoniza un nuevo comercial de la NFL
Al respecto, Gracie declaró a la revista Nylon: “Vi las retransmisiones en vivo de los conciertos en los que no estuve. Me siento emocionada, agradecida y en estado de shock porque, como comunidad mundial, ya no podemos experimentar esa fuente de luz. Yo también me empapaba de cada momento de su espectáculo. Llevo un año y medio estudiándola. Cada vez que he actuado como telonera, observo y aprendo. Aprendo de ella cada vez que tenemos una conversación sobre el tiempo, incluso”.
Gracie también aceptó el reto de actuar ante grandes multitudes. Así lo dijo: “Cuando pienso en actuar en salas más grandes, pienso en el ‘Eras Tour’ como un pozo inagotable de información para mí. Me sentía como si estuviera en la escuela para hacer este trabajo. Antes me asustaba la idea de no tocar en una sala de 100 localidades. Hace un minuto que no me asusto. En todo caso, puedes conocer a más gente en salas más grandes”.
Gracie estrenó el tema ‘That’s So True’ al final de la gira y recordó cómo cambió la actitud del público hacia ella.
Dijo: “Es curioso ver lo que una canción puede hacer por el compromiso. En tu cabeza piensas: ‘Por supuesto’. Pero es una locura verlo semana tras semana en un estadio. Fue una auténtica locura. Fue diferente, sin duda. Hay algo realmente psicótico en poder oír voces en el estadio que te devuelven la mierda cantada”.