Por petición del gobernador Greg Abbott, los hospitales de Texas se adhirieron a una medida que afecta a los inmigrantes indocumentados. Esta iniciativa entra en vigor el viernes 1 de noviembre, a pocos días de las elecciones en Estados Unidos, donde el ingreso de extranjeros no autorizados es un tema candente. Previamente, Ron DeSantis implementó esta medida en los centros médicos de Florida.
A partir de ahora, el personal de los hospitales del Estado de la Estrella Solitaria debe preguntar a los pacientes si se encuentran legalmente en el país y hacer un registro del costo de aquellas personas que no tengan estatus legal. El objetivo es enviar la información al gobierno federal y solicitar un reembolso de los gastos.
Te puede interesar: Si Donald Trump llega a la presidencia, ¿es posible que haga la “deportación más grande de la historia”?
El personal de los hospitales de Texas recibió directivas de la administración de Greg Abbott y de la Asociación de Hospitales del estado. “Lo fundamental para los pacientes es que esto no cambia la atención y los centros siguen siendo un lugar seguro para ellos”, señalaron desde la organización.
Inmigración y seguridad fronteriza: temas clave en la elección de Estados Unidos
¿Cómo funciona esta norma en Texas?
Los centros hospitalarios del Estado de la Estrella Solitaria están obligados a enviar la información recabada sobre inmigrantes indocumentados a partir de marzo. Así, tendrán que rellenar un informe con los datos de los pacientes que se atiendan de emergencia o sean internados, que incluirá una pregunta sobre su estatus legal en Estados Unidos.
Te puede interesar: Con México a la cabeza, no creerás la cantidad de inmigrantes que el USCIS naturalizó en los últimos 10 años
Asimismo, también se incluirán aquellos cubiertos por Medicaid o el Programa de Seguro Médico para Niños, conocido como CHIP.
¿Es obligatorio responder a preguntas de inmigración en los hospitales de Texas?
El personal de los hospitales de Texas advirtió del posible impacto que puede generar esta medida, al causar temor entre los inmigrantes indocumentados y provocar que eviten acceder a una atención médica necesaria. En tanto, aclararon que los pacientes no están obligados a responder a las preguntas sobre la situación de su estatus en el país.
Además, los trabajadores de los centros médicos deben informar a los pacientes que sus respuestas no afectarán a la atención que reciban, tal como está establecido en la ley federal.