En la costa de California, justo cuando el invierno se hacía sentir con toda su fuerza , un trabajador de la construcción puede haber conseguido hacer historia en el surf.
Con el océano que rugía bajo un oleaje imponente, el muelle de Santa Cruz destrozado y la tarde avanzada, Slebir se lanzó a una colosal pared de agua que podría convertirse en la ola más grande jamás surfeada.
Mientras los rumores crecen y los ojos se dirigen al posible récord, queda la gran pregunta: ¿superará esta ola los imponentes 86 pies (26.2 metros) de Nazaré, Portugal, que ostenta actualmente el título en el libro de los Guinness World Records?
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El emotivo mensaje que compartió el trabajador de la construcción
Alessandro “Alo” Slebir, el joven de 23 años y residente de California, dejó al mundo boquiabierto al enfrentarse a una ola de proporciones colosales en los Mavericks, una icónica zona de surf cerca de Half Moon Bay.
Fue el pasado 23 de diciembre a las 3:15 p.m. cuando atrapó la ola que el Equipo de Rescate de los Mavericks estima en unos impresionantes 108 pies (32.9 metros) de altura, al superar ampliamente el récord mundial de 86 pies (26.2 metros).
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“Ayer, surfeé y presencié algunas de las olas más grandes de la vida. Esta ola fue una de las que me marcaron”, escribió en su perfil de Instagram.
La publicación no tardó en volverse viral. Figuras del surf como Kai Lenny comentaron “Ola de 100 pies”, mientras que Mason Barnes aseguró: “Ese es el récord mundial”.
¿Por qué esta ola podría ser la más grande del mundo?
El logro en California no destaca únicamente por el tamaño monumental de la ola de 108 pies (32.9 metros), sino también por la impresionante destreza que demostró el hombre al montarla.
Con movimientos precisos, Slebir descendió desde la cima, esculpió una línea elegante a lo largo de toda la cara de la ola y terminó entrando y saliendo de un barril masivo con absoluta maestría.
Bill Sharp, organizador del Big Wave Challenge y experto en olas gigantes, quedó asombrado con la hazaña. “Es una de las olas más grandes jamás capturadas en fotos y videos”, comentó.
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Aunque considera que la estimación de su altura podría ser algo generosa, no dudó en afirmar que esta ola “absolutamente está en el territorio del récord mundial”.