La reconocida actriz Elle Fanning ha revelado en una reciente entrevista sus inquietudes sobre el uso excesivo de las redes sociales. A pesar de ser una figura pública con millones de seguidores, Fanning ha confesado que intenta limitar su tiempo en plataformas como Instagram para proteger su salud mental y mantener una conexión más genuina con el mundo.
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Elle Fanning evita usar las redes sociales
Elle Fanning intenta mantener de forma saludable su uso de las redes sociales, pero “no puede evitar” caer a veces en “la madriguera del conejo”.
La actriz de Hollywood, de 26 años, admitió que la única plataforma que utiliza es Instagram e intenta asegurarse de que su feed siga siendo un “lugar seguro”, pero a menudo se da cuenta de que no puede resistir compararse con los demás.
Elle Fanning “se apoya” en su hermana mayor Dakota Fanning
Así lo contó al periódico The Guardian: “Trato de tener mucho cuidado. Sólo tengo Instagram, pero lo miro mucho. Creo que la cultura de la comparación puede ser una locura. Los comentarios catastrofistas y todo eso... Quiero que sea un lugar seguro para mí. Pero, por supuesto, a veces es inevitable caer en el agujero de compararse con los demás y todas esas imágenes filtradas”.
Elle admitió que está bastante desconcertada por los videos que aparecen en su feed de la red social, diciendo: “Son personas que hacen rodar vasos por las escaleras, con canicas dentro. Pienso: ‘Oh, ¿esa se va a romper? ¿Qué es eso?...’. Quiero decir, en serio, no lo sé. También me gusta ver cómo se limpian las alfombras. Estas alfombras que están llenas de barro... Nunca lo he hecho. Pero me gusta ver esos videos”.
Elle admitió anteriormente que le preocupan las imágenes de “belleza inalcanzable” en Instagram y cree que la exposición constante a imágenes “falsas” ha pasado factura a la salud mental de los jóvenes.
Así lo indicó al periódico: “Las redes sociales están más de moda ahora que entonces. La naturaleza comparativa de las mismas, el esfuerzo por alcanzar ciertos estándares de belleza... Sigo en Instagram todo el tiempo, mirando todas esas imágenes de otras chicas y comparándome conmigo misma. Muchas de esas imágenes son falsas, están trucadas o muy bien diseñadas, así que te metes en la madriguera de la belleza inalcanzable, las formas corporales de moda, lo que está de moda y lo que no. Esa comparación constante puede ser muy perjudicial para los jóvenes y su salud mental”.
