Mientras los residentes de Texas siguen con entusiasmo las novedades sobre la construcción del tren de alta velocidad en el estado, los encargados de su creación advierten que el segundo mandato de Donald Trump podría frenarlo. ¿Cuáles son los motivos?
Meses atrás, Amtrak recibió 64 millones de dólares de la Administración Federal de Ferrocarriles (FRA, por sus siglas en inglés) para restablecer una ruta del tren bala de Dallas a Houston. Sin embargo, el presidente electo de Estados Unidos y sus legisladores republicanos podrían impedir que continúe el proyecto de este sistema ferroviario en el Estado de la Estrella Solitaria.
Aunque el proyecto se encuentra recién en sus primeras etapas, algunos temen que la nueva administración esté en contra de la línea que transportaría a los pasajeros a velocidades máximas superiores a 200 millas por hora (320 kilómetros), convirtiendo lo que actualmente es un viaje de tres horas y media en automóvil en uno de 90 minutos en tren.
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Regresan los trabajos del Tren Maya
¿Cuál es el mayor problema que enfrenta el tren de alta velocidad de Texas?
Después de que Joe Biden respaldó el apoyo financiero federal para la expansión del ferrocarril, los republicanos intentan que el dinero provenga del sector privado y han tratado particularmente de detener el proyecto.
Junto con el gobernador de Texas, Greg Abbott, los legisladores quieren evitar que los dólares de los impuestos estatales paguen el tren de alta velocidad y, por esa razón, bloquearon durante meses los esfuerzos de la compañía para apoderarse de los terrenos necesarios para su construcción mediante expropiación.
Años atrás, los representantes aprobaron una ley destinada a impedir que la empresa reciba dinero del estado para crear trenes. En ese momento, el senador estatal Robert Nichols, que encabeza el Comité de Transporte, dijo: “Si puede construirse sin dinero estatal o federal, sin tomar propiedad privada, por mí está bien. Pero no pueden. Si se tratara de una inversión que pagaría grandes dividendos, sería un asunto completamente diferente. Esa no es una inversión que vaya a dar dividendos. Ese es un gran agujero de costos que es un pozo sin fondo”.
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En ese sentido, expertos y defensores del sistema ferroviario coinciden en que “es difícil imaginar cómo se podría construir la línea sin dólares estatales”, dado que el costo proyectado de la ruta es de más de 30 mil millones de dólares.
¿Qué dijo Trump sobre la creación del tren bala?
Aunque el presidente electo mostró una visión diferente en su campaña con respecto a los trenes de alta velocidad en el país, algunos están preocupados por su decisión final. En una conversación con Elon Musk, Trump preguntó por qué EU no tiene su propio tren bala. “Van increíblemente rápido, increíblemente cómodos y sin problemas, y no tenemos nada parecido en este país. Ni siquiera cerca. Y no tiene sentido que no lo hagamos”, dijo.
Sin embargo, durante su primer mandato, el republicano canceló más de 900 millones de dólares federales para ayudar a pagar la línea ferroviaria de California entre Los Ángeles y San Francisco, por lo que Texas teme que quite la financiación para la creación de este ansiado transporte.
