El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS por sus siglas en inglés) ha centrado su atención en más de 400 migrantes que ingresaron al país ilegalmente, mediante una sofisticada red de tráfico de personas. Esta podría destrabar una investigación aún mayor, dado que se evalúa una posible conexión con el grupo terrorista ISIS.
Aunque el objetivo principal de esta red era el contrabando de personas, las autoridades han identificado vínculos con la misma organización que facilitó la entrada de un grupo de ciudadanos uzbekos el verano pasado, quienes cruzaron la frontera sur de Estados Unidos con la ayuda de un facilitador relacionado con el grupo criminal. Este incidente ha desencadenado una serie de medidas para reforzar el monitoreo de migraciones.
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¿Cuáles serían las conexiones entre este tráfico de migrantes y el ISIS?
En diálogo con la cadena CNN, uno de los funcionarios explicó que la red de tráfico no buscaba necesariamente introducir terroristas en Estados Unidos. Sin embargo, se detectó que esta está vinculada con otra bajo investigación del DHS.
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En el caso actual, los 400 migrantes bajo escrutinio provienen sobre todo de países de Asia Central y permanecen bajo sondeos exclusivamente por su conexión con el tráfico de personas. Alejandro Mayorkas, Secretario de Seguridad Nacional, aclaró que el departamento no ha identificado a “400 personas con posibles vínculos con ISIS”.
Aunque varios de estos sujetos fueron detenidos por las autoridades de inmigración, no se ha identificado ningún caso de amenaza concreta a Estados Unidos. Pero tampoco se descarta del todo esta posibilidad.
La preocupación por migrantes asiáticos
La revisión de estos casos llega en un momento en que las autoridades estadounidenses están cada vez más preocupadas por los inmigrantes de naciones de Asia Central como Tayikistán y Uzbekistán. A principios de este mes, ocho ciudadanos tayikos fueron arrestados en el país tras descubrirse que tenían conexiones específicas y preocupantes con ISIS.
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Desde el verano pasado, los funcionarios locales centraron su atención en los migrantes provenientes de esta región. El episodio con los llegados desde Uzbekistán impulsó una respuesta coordinada del gobierno para localizar e investigar a estos individuos y asegurarse de que las autoridades de inmigración e inteligencia monitoreen a quienes viajan desde este tipo de naciones.
