Lo que parecía una simple parada de tráfico en Windsor, California, se convirtió en un operativo inusual cuando las autoridades descubrieron metanfetaminas, abulones recolectados ilegalmente y hasta una tortuga viva en un vehículo. El incidente ocurrió el pasado miércoles por la noche en Shiloh Road cuando los agentes se acercaron a un coche estacionado que levantó ciertas sospechas.
Al verificar los antecedentes del conductor, un hombre de 46 años, los oficiales descubrieron que se encontraba en libertad condicional por delitos menores y que además tenía órdenes de arrestos pendientes en los condados de Lake y Mendocino. Su acompañante, una mujer de 35 años, admitió que llevaba metanfetaminas y parafernalia para su consumo, por lo que ambos fueron detenidos en el lugar.
La sorprendente incautación en un coche de California
“Durante la inspección del vehículo, se localizaron numerosas agujas hipodérmicas y otras parafernalias asociadas”, explicó el Departamento de Policía del poblado de Windsor en Facebook. Además, se localizaron aproximadamente 35 abulones vivos, una tortuga de estanque del noroeste, ropa mojada y herramientas utilizadas para eliminar el abulón de las rocas”, añadió.
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El abulón rojo, una especie protegida en California, vio una disminución drástica en su población debido a la sobreexplotación y el cambio climático. Su lento crecimiento lo hace especialmente vulnerable a la caza furtiva, que es común en el mercado negro debido a su alto valor gastronómico.
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Más allá de estos moluscos, lo que más llamó la atención fue sin dudas esa tortuga de estanque del noroeste, una especie nativa de la región. Aunque el conductor no explicó cómo llegó a su posesión, se sospecha que fue tomada de su hábitat natural durante su recorrido por la costa.
Consecuencias legales y protección de la vida silvestre en California
Dado el estado crítico de la población de abulones en California, los ejemplares incautados no pudieron ser devueltos al océano y fueron desechados. La tortuga, en cambio, fue entregada a control animal y posteriormente liberada en su entorno natural.
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Los sospechosos fueron trasladados a la cárcel del condado de Sonoma. El conductor enfrenta múltiples cargos, que incluyen violación de su libertad condicional y posesión ilegal de vida silvestre, mientras que su acompañante fue acusada de posesión de metanfetaminas.
