El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) arrestó a más de 7,000 migrantes ilegales desde que el presidente Donald Trump dio luz verde a las redadas de deportación hace poco más de dos semanas. Según un informe publicado a través de X, para el viernes pasado llevaban detenidos ya 7,260 personas en situación irregular.
Además, el ICE presentó 5,763 solicitudes de retención a las autoridades locales para que entreguen a inmigrantes con órdenes de deportación lo antes posible. Estas cifras reflejan la nueva estrategia de la administración para endurecer las políticas migratorias.
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Las redadas se intensificaron considerablemente en los últimos días, y los agentes migratorios recibieron instrucciones de priorizar la detención de extranjeros con antecedentes criminales. Esta política desató una ola de críticas de organizaciones de derechos humanos, que argumentan que muchas familias son separadas en el proceso.
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Operativos del ICE en ciudades santuario
Las redadas del ICE se centraron principalmente en ciudades santuario
como Nueva York,
Chicago y Boston, donde se detectó una mayor concentración de inmigrantes en situación irregular. Entre los detenidos, se encuentran personas acusadas de delitos graves, como violación, crímenes sexuales contra menores y posesión ilegal de armas y drogas, según los informes oficiales.
Las operaciones también llevaron a la captura de miembros de pandillas como el Tren de Aragua y MS-13, lo que según las autoridades representa un golpe importante contra el crimen organizado. El ICE señaló que algunos de los arrestados ya contaban con órdenes de deportación previas.
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Los operativos generaron protestas en varias ciudades, en donde los defensores de los derechos de los migrantes denunciaron que las detenciones crearon un clima de miedo en las comunidades extranjeras. Pese a esto, la administración Trump reiteró que su objetivo es garantizar la seguridad nacional y hacer cumplir las leyes vigentes.
Casos destacados entre las detenciones del ICE
El ICE proporcionó información limitada sobre algunos de los detenidos, aunque resaltó que todos los casos publicados corresponden a individuos con antecedentes criminales. Entre ellos, se encuentran los casos de José Ortega Ramírez y Seyidxan Hisen Salih, acusados de posesión de pornografía infantil y narcotráfico respectivamente.
El gobierno federal insistió en que la prioridad es la captura de inmigrantes con historiales delictivos, aunque activistas advierten que muchas personas sin antecedentes también fueron detenidas en las redadas. La administración prometió continuar con estos operativos en las próximas semanas.