Los agentes de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) informaron recientemente en sus portales oficiales una incautación récord de fentanilo, metanfetamina, armas y municiones en el puerto de entrada de Mariposa en Nogales, Arizona. Estas confiscaciones, que comenzaron en el mes de mayo, se suman a una larga lista de casos de contrabando de drogas y armas provenientes desde México, en una crisis que ha ido en aumento en los últimos tiempos.
Las incautaciones masivas en la frontera de Arizona
Durante el pasado mayo, los agentes del CBP interceptaron más de tres millones de pastillas de fentanilo en una sola carga, con la ayuda de un equipo canino experto en detectar drogas. Se estima que fueron recolectadas cerca de 3,372,300 dosis, todas ellas escondidas dentro de vigas de acero huecas en el piso del remolque.
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Según la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), siete de cada diez pastillas de fentanilo contienen una dosis letal. Con esta métrica, las pastillas incautadas tenían el potencial de matar al menos a 2.36 millones de personas.
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Por si fuera poco, los agentes de CBP confiscaron durante este operativo unos 13,460 cartuchos de munición para rifles de asalto. Esta se hallaba oculta dentro de los paneles y cortafuegos de un vehículo y en una de sus puertas.
La metanfetamina: otra sustancia clave en el operativo de la CBP
En una operación comercial en el puerto de entrada de Nogales, los agentes del CBP descubrieron 323 libras (146.5 kilogramos) de metanfetamina escondidas en un cargamento de carbón.
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Algunas de las bolsas contenían paquetes disfrazados de troncos de carbón mezclados con la metanfetamina en cuestión. Utilizando la métrica de una dosis letal de 200 miligramos de esta droga, la cantidad era suficiente como para matar a más de 2,267 personas.