La vitamina D es uno de los nutrientes más necesarios en el cuerpo humano y ayuda a nuestro organismo a mantener la salud. Por eso, es importante revisar los niveles que tenemos de este elemento y, en caso de que sea necesario, suplementarlo de una manera adecuada.
Consejos para una buena alimentación durante las vacaciones
Con la influencia del efecto del aislamiento preventivo ante la emergencia sanitaria por la pandemia por Covid-19, muchos habitantes presentaron déficit de vitamina D. En la actualidad, mostraron carencia el 40% de la población europea, el 24% de la estadounidense y el 37% de la canadiense.
Te puede interesar: La dieta ideal para tener una vida larga y sana, según Harvard
Los beneficios de la vitamina D en el organismo van desde la facilitación en la absorción del calcio y el fortalecimiento del metabolismo óseo hasta la prevención de síntomas de enfermedades inmunológicas, infecciones o dolencias crónicas.
¿Cuánta vitamina D se debe consumir diariamente?
La vitamina D se puede potenciar a través de la exposición al sol, del consumo de determinados alimentos ricos en este elemento o de manera directa con suplementos vitamínicos. Los expertos recomendaron una exposición al sol diaria de alrededor de 15 minutos, con una protección solar de entre 15 y 30. En el caso de personas mayores o que padezcan osteoporosis, se debe prolongar hasta la media hora.
Te puede interesar: El ranking de ciudades con peor sueño de Estados Unidos
¿Cómo saber si necesito suplementar la vitamina D en mi organismo?
El nivel de vitamina D en el organismo se determina a través de la concentración sérica de 25(OH)D.
- Si se presenta un valor superior a 20 nanogramos por mililitro, se poseen los niveles óptimos de este elemento para la población general. En el caso de los mayores de 65 años, se deberán superar los 30 ng/mL.
- Será un nivel insuficiente si se posee un valor de entre 12 y 20 ng/mL.
- Y un nivel deficiente si se encuentra por debajo de los 12 ng/mL.
- En el otro extremo, si se presenta un valor superior a 100 ng/mL, se padece hipervitaminosis D, que generó preocupación también.
Los síntomas de la hipervitaminosis D son hipercalcemia, debilidad y fatiga. En casos agravados, pueden padecer poliuria, polidipsia, insuficiencia renal, calcificaciones ectópicas, depresión, dolor óseo o cálculos renales.