En noviembre, el segundo embalse de agua más grande de California vivió un cambio sorprendente en su nivel . Lo que parecía un mes tranquilo terminó con lluvias torrenciales que llenaron embalses de forma repentina y marcó uno de los mayores aumentos registrados.
Todo comenzó con un ciclón bomba que trajo lluvias intensas y vientos al noroeste del Pacífico y causó apagones masivos y tragedias para varias familias californianas. A pesar de los daños, el diluvio resultó beneficioso para las áreas naturales, que recibieron un impulso significativo tras años de desafíos hídricos.
Este evento no solo resalta la fuerza impredecible de la naturaleza, sino también la importancia vital de estos embalses en el equilibrio hídrico del estado.
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¿Qué es un ciclón bomba?
Un ciclón bomba es como una tormenta en “modo turbo”. Según la NOAA, este fenómeno ocurre cuando la presión atmosférica en una tormenta baja rápidamente en un periodo corto de tiempo, intensificándola de forma impresionante.
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Este cambio brusco la convierte en un sistema mucho más potente, con ráfagas de viento más fuertes y lluvias más intensas, capaces de causar estragos en su camino.
Además, cuando un ciclón bomba coincide con ríos atmosféricos, se crea una combinación explosiva. Estos “ríos en el cielo” son largas corrientes de vapor de agua que fluyen a través de la atmósfera y transportan enormes cantidades de humedad desde los trópicos hacia otras regiones.
¿Qué popular lago se benefició del clima californiano?
El lago Oroville, uno de los destinos más conocidos de California, recibió un gran respiro gracias a las intensas lluvias de noviembre. Este embalse, vital para la gestión hídrica del estado, experimentó un aumento notable en su nivel de agua.
A principios del mes, estaba en 763.48 pies (232.61 metros), pero para el 30 de noviembre alcanzó los 781.24 pies (238.08 metros), un incremento de más de 18 pies (5.4 metros).
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El cambio más impresionante ocurrió entre el 19 y el 24 de noviembre y fue impulsado por el ciclón bomba y los ríos atmosféricos. Durante meses, había registrado una caída constante, reflejo de las sequías que suelen afectar a la región.
