En junio, el presidente en funciones Joe Biden implementó restricciones en el acceso de inmigración irregular en la frontera entre Estados Unidos y México. El demócrata decretó que se negarían las solicitudes de asilo a los extranjeros que ingresaran de forma no autorizada al país. De cara a que Donald Trump asuma la presidencia en enero del 2025, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) advirtió un fenómeno que sucederá previamente.
En octubre, primer mes del año fiscal 2025, los datos de la CBP detallan que se registraron 56,530 encuentros entre inmigrantes y agentes de la frontera. Si bien supone un incremento del 5% con respecto a las cifras de septiembre, se trata de una caída del 70% con respecto al mismo período del 2023.
Te puede interesar: Texas le ofrece a Donald Trump esta área de tierras en la frontera con México para las deportaciones
A menos de dos meses de que Trump asuma la presidencia de EU, la CBP prevé que noviembre cierre con menos de 50,000 cruces irregulares, lo que representaría un promedio diario de 1,550. El número más bajo registrado este año se dio en septiembre, con 54,000.
Donald Trump regresa: ¿Qué significa “America First” para México y el mundo?
Cruces no autorizados en la frontera en la adminsitración de Biden
Los encuentros fronterizos alcanzaron su máximo en diciembre del 2022 bajo el gobierno de Biden, cuando se registraron 250,000. Durante la administración de Trump, la cifra más alta se dio en mayo del 2019, con 133,000.
En tanto, el demócrata impulsó la aplicación CBP One, a través de la cual los inmigrantes pueden programar una cita en los más de 300 puntos de entrada para realizar una entrevista con los funcionarios. Según los datos oficiales, esta herramienta permitió la regularización de alrededor de 40,000 extranjeros.
Te puede interesar: “Ciudad santuario": esta urbe de California protegerá a los inmigrantes de las deportaciones
¿Qué hará Trump con la aplicación CBP One?
El presidente electo anunció durante su campaña electoral que tenía la intención de eliminar la aplicación CBP One, en medio de sus promesas sobre políticas migratorias más restrictivas y de realizar “la mayor deportación de la historia de EU”. Además, emitió un aviso a los inmigrantes que se encuentren de forma irregular en el país: “Prepárense para irse, porque van a salir muy rápido”.
