Un grupo de agentes de Aduanas y Protección Fronteriza de EU (CBP, por sus siglas en inglés) realizaron una importante confiscación en el puerto de entrada de Presidio, Texas, el pasado lunes 23 de septiembre. El hecho sucedió cuando un vehículo proveniente de México fue detenido con un cargamento ilegal de 748 libras de mortadela mexicana, y más de 280 contenedores de medicamentos recetados no declarados.
Durante la inspección, los oficiales de la CBP descubrieron la carne oculta en maletas pesadas, así como los medicamentos escondidos dentro del vehículo, el cual era conducido por una mujer de 43 años con ciudadanía estadounidense. Conoce los detalles detrás de este operativo en el Estado de la Estrella Solitaria.
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La incautación de carne y medicamentos en la frontera, por parte de la CBP
La mortadela mexicana, fabricada con carne de cerdo, está prohibida en Estados Unidos debido al riesgo de introducir enfermedades animales extranjeras que podrían afectar a la industria porcina del país. Según la CBP, este alimento fue destruido para cumplir con las regulaciones del Departamento de Agricultura (USDA).
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Entre los medicamentos confiscados, los agentes encontraron Tramadol, Fentermina, Alprazolam, Clonazepam y otros fármacos, todos ocultos con la intención de eludir las leyes de declaración. El Tramadol, en particular, está regulado por su potencial de abuso, lo que aumenta la gravedad del delito.
Consecuencias para la infractora capturada por la CBP
Además de la confiscación de la mercancía, las autoridades impusieron una multa de 1,000 dólares a la conductora del vehículo. Este tipo de violaciones no solo acarrea sanciones económicas, sino también la posible detención y procesamiento legal de los involucrados.
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El director del puerto de Presidio, Benito Reyes Jr., subrayó la importancia de que los viajeros se informen sobre los productos permitidos en Estados Unidos. La CBP trabaja junto al USDA y el Departamento de Seguridad Nacional para impedir la entrada de este tipo de artículos al país.
