Las calaveritas literarias son una de las tradiciones más representativas del Día de Muertos en México. Estos poemas breves, con tono humorístico y satírico, sirven para recordarnos que la muerte es parte inevitable de la vida, pero siempre con una sonrisa en los labios. Aquí te explicaremos cómo crear una calaverita literaria con sencillos pasos para no ‘fallecer’ en el intento.
¿Tienes algún niño difunto? Dedícale un ritual este 1ro de noviembre
¿Qué es una calaverita literaria?
Una calaverita literaria es un poema tradicional que surge durante la celebración del Día de Muertos. En estos versos, la muerte es la protagonista, apareciendo como un personaje que interactúa con alguien (una persona común, un amigo, o incluso una figura pública) llevándoselo de manera irónica o humorística al más allá (o mejor dicho, al Mictlán). A menudo, las calaveritas se usan para satirizar a personajes célebres o políticos, utilizando la burla y la crítica social.
¿Cómo escribir una calaverita literaria?
Para comenzar a escribir tu propia calaverita literaria, es fundamental recordar que nuestra cultura es de las pocas que suele reírse de (y con) la muerte, además de otros aspectos clave:
1. Estructura básica: Una calaverita literaria sigue una estructura simple que se divide en tres partes: inicio, desarrollo y desenlace. Cada una de estas partes se desarrolla en estrofas de cuatro versos, que usualmente tienen una métrica octosílaba, es decir, cada verso debe contar con ocho sílabas.
2. La muerte como personaje central: El tema principal de toda calaverita es la muerte, quien debe interactuar con el personaje al que se le dedica el poema. Puedes referirte a ella de varias maneras: Catrina, flaca, huesuda, parca, entre otros términos que enriquecen el vocabulario.
3. Caracteriza al personaje: Si vas a escribir sobre una persona en particular, identifica sus características más notables, ya sean físicas, psicológicas o hábitos cotidianos. También puedes pensar en situaciones que la persona a menudo enfrenta o en lugares que frecuenta, lo que le dará un toque más personal y humorístico a tu calaverita.
4. Situaciones graciosas e imaginativas: Una de las claves para que la calaverita sea entretenida es incluir situaciones cómicas o absurdas. Imagina cómo el personaje se encuentra con la muerte y qué diálogo podrían tener. Recuerda que el objetivo es que la historia divierta y sorprenda al lector.
Rima y métrica para calaveritas literarias
El ritmo y la sonoridad son cruciales en las calaveritas. Para lograr una cadencia adecuada, asegúrate de que tus versos sigan una rima consonante o asonante. Los esquemas de rima más comunes son ABAB, donde el primer verso rima con el tercero, y el segundo con el cuarto, o bien ABBA, donde el primero rima con el cuarto, y el segundo con el tercero.
Te puede interesar: Día de Muertos: Esto es lo que debe llevar una ofrenda tradicional
Además, procura que todos los versos tengan la misma cantidad de sílabas, preferiblemente ocho. Aunque también se pueden usar versos de siete o hasta once sílabas, mantener la uniformidad en cada estrofa garantiza un mejor flujo y ritmo.
Consejos para escribir una calaverita literaria
Aquí te dejamos algunos consejos prácticos para escribir una calaverita literaria.
- Sinónimos a la mano: Contar con una lista de palabras relacionadas con la muerte (catrina, parca, huesuda) te facilitará la escritura.
- No temas reescribir: Es normal que al principio no salga perfecto. La escritura es un proceso de revisión constante.
- Canta las sílabas: Un buen truco es leer o cantar los versos en voz alta. Esto te ayudará a verificar que las rimas y el ritmo fluyan de manera natural.
Ejemplo de una calaverita literaria
¿Nos echamos una calaverita para nuestro querido Tío Richie? ¡Claro que sí!
Llegó la calaca a Elektra,
buscando a Salinas Pliego,
dijo: “Ya no te me escapas,
hoy te llevo sin despego.”
Ricardo, siempre en su trono,
le contestó con destreza:
“Calaca, dame un momento,
todavía falta empresa.”
“Banco Azteca va tan bien,
y Totalplay tiene altura,
si me llevas, te arrepientes,
mejor sigue tu locura.”
La Muerte, toda burlona,
le respondió decidida:
“Ni tus negocios te salvan,
hoy te llevo a otra vida.”
Salinas, sin más palabras,
a la Muerte acompañó,
y entre risas en la tumba,
un imperio construyó.
Te puede interesar: Día de Muertos 2024: ¿Cuándo se pone el altar para las mascotas y qué debe llevar?
Escribir una calaverita literaria es una tradición divertida y llena de creatividad. Lo importante es jugar con las palabras, emplear el humor, y seguir la estructura básica. Claramente no necesitas ser un poeta experto para disfrutar de esta actividad, solo deja que fluya tu imaginación y no tengas miedo a experimentar.
Con información de Marlene González y Mikel González de Conecta.Tec.