Uno de los artistas mexicanos más queridos a nivel internacional, sin duda alguna, es Luis Miguel, quien es reconocido como el cantante latino mejor pagado en Las Vegas, ha llenado el Madison Square Garden y consiguió el título como el primer latino con 266 canciones con más de un millón de reproducciones en Spotify. Pero tal parece que a su lista de éxitos le falta un logro con el que el también llamado ‘El Sol de México’ ha soñado por muchos años, cantar en el Palacio de Bellas Artes de la CDMX.
Alberto Tavira nos habla del libro “Luis Miguel: Por debajo de la mesa”
Luis Miguel lanzó su segundo álbum de Romances en 1994 y lo celebró con dieciséis presentaciones en el Auditorio Nacional, pero lo que realmente quería era un concierto en el Palacio de Bellas Artes donde artistas como Pedro Infante y Lola Beltrán ya habían cantado. Además de Juan Gabriel quien pisó ese recinto en dos ocasiones, en 1990 y 2013.
En 1994 se dio a conocer que Gerardo Estrada, director general del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) en el último año de mandato de Carlos Salinas de Gortari, se negó a que Luis Miguel se presentara en este escenario: “He sido de los que piensa que cada cosa en su lugar y que el tipo de espectáculo que hace popular sí merece estar en Bellas Artes, pero sólo con artistas muy consagrados. Todavía era muy joven en ese momento”, contó en el podcast Luis Miguel, ¿culpable o no? del periodista Alberto Tavira.
También se sabe que ante la negativa, se llegó a un acuerdo con los promotores, en el que el cantante pudo grabar un video musical, ‘El día que me quieras’, donde se le ve recorrer los pasillos y cantar desde el palco, pero existió una única condición, que no pisara el escenario del emblemático Palacio de Bellas Artes.
