La tercera ola de calor recién terminó y la cuarta inició este lunes, situación que afectará a diversas entidades de nuestro país donde las altas temperaturas se harán presentes y también los rayos UV.
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Lejos de pensar en un bronceado de envidia, es momento de tomar precauciones y no exponernos al Sol, pues los rayos UV no dan tregua, aunque le aportan cosas buenas a nuestro cuerpo, también pueden generar ciertos riesgos como quemaduras e incluso cáncer de piel.
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¿Qué son los rayos ultravioleta?
De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, la radiación ultravioleta son rayos imperceptibles que forman parte de la energía que viene del Sol. Llega a la superficie de la Tierra y se compone de dos tipos: UVA y UVB.
No obstante, los rayos ultravioleta no solo provienen del Sol, sino también de lámparas solares y aparatos eléctricos como computadoras o celulares, incluso camas de bronceado, por lo que hay que utilizarlos con mesura.
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¿Cuáles son los efectos de los rayos UV?
La radiación ultravioleta (UV) es la responsable de los efectos biológicos más importantes sobre el ser humano. No obstante, en la piel tiene efectos nocivos a corto y mediano plazo, puede ir desde el enrojecimiento y ardor hasta quemaduras, aunque también puede derivar en cáncer de piel y envejecimiento prematuro.
¿También afecta la vista?
Además de tener consecuencias sobre la piel, los rayos UV también tienen efectos negativos en la visión. La afección más frecuente es la aparición prematura de cataratas, que en casos extremos producen ceguera.
Pero eso no es todo, también se da la degeneración macular. Si miramos la arena, el agua de mar o la nieve sin protección, podríamos perder poco a poco el centro del campo visual, deteriorando nuestra retina.
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Según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, también puede generarse supresión inmune, cuando el cuerpo suprime el funcionamiento del sistema inmunológico y las defensas naturales de la piel.
¿Cómo cuidarnos de los rayos UV?
- Usar protección solar para todo tipo de piel.
- Aplicar protección solar FPS 30+.
- Usar ropa de algodón de manga larga, sombrero, gorra o gafas con filtro UV.
- No exponerse al sol por tiempo prolongado.