En la era digital en la que vivimos, nuestros datos personales están más expuestos que nunca. El robo de identidad digital se ha convertido en un delito frecuente y preocupante, ya que afecta a millones de personas en todo el mundo.
Cada vez más personas utilizan internet para realizar transacciones financieras, compartir información personal y participar en redes sociales, lo que ha creado un escenario perfecto para los ciberdelincuentes.
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¿Qué es el robo de identidad digital?
El robo de identidad digital es un delito, donde una persona con malas intenciones obtiene información personal para poder suplantar a otra en la web. Esto incluye direcciones, números de seguridad social, tarjetas de crédito y contraseñas.
Una vez que los ciberdelincuentes tienen acceso a esta información, pueden realizar una variedad de actividades fraudulentas, por ejemplo, hacer compras con tarjetas de crédito robadas, abrir cuentas bancarias falsas o incluso cometer delitos en nombre de la víctima.
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¿Cómo hacen el robo de identidad digital?
Existen diversas formas en las que los ciberdelincuentes pueden obtener la información necesaria para llevar a cabo el robo de identidad digital. Algunas de las técnicas más comunes incluyen:
- Phishing: Los estafadores envían correos electrónicos o mensajes de texto falsos, los cuales parecen provenir de instituciones legítimas, donde piden información personal.
- Malware: Los ciberdelincuentes pueden infectar los dispositivos de las personas con programas maliciosos que recopilan información personal y la envían a los atacantes. Estos pueden ser descargados al abrir archivos adjuntos o al visitar sitios web infectados.
- Ataque a base de datos: Los hackers pueden obtener acceso a bases de datos con la información personal de los usuarios.
¿Cómo evitar el robo de identidad digital?
Afortunadamente, existen medidas que podemos tomar para proteger y reducir el riesgo de convertirnos en víctimas de robo de identidad digital.
1. Mantener contraseñas seguras:
Utilizar contraseñas fuertes y únicas para cada cuenta es fundamental. Se recomienda el uso de autenticación de dos pasos siempre que esté disponible.
2. Ser cauteloso con los correos electrónicos y mensajes sospechosos:
Nunca se debe hacer clic en enlaces o descargar archivos adjuntos de remitentes desconocidos o sospechosos.
3. Mantener los dispositivos actualizados:
Las actualizaciones de software suelen incluir parches de seguridad que corrigen vulnerabilidades conocidas.
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