En esta época de intenso calor, podemos pensar en sacarle provecho a los días lluviosos. Dicho de otra forma, guardar el agua que expulsan las nubes para beberla posteriormente. Sin embargo, no es tan pura y limpia como podría suponerse; ya que, beber agua de lluvia implica algunos riesgos para el cuerpo humano y su salud general.
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Por lo tanto, debemos tener en cuenta que el agua de lluvia contiene las impurezas y contaminantes presentes en el medio ambiente como polvo, polen, productos químicos agrícolas y otras sustancias industriales. Desde luego, estas sustancias afectan la calidad y salubridad del agua.
Sin embargo, uno de los mayores riesgos de beber agua de lluvia se vincula con la presencia de microorganismos patógenos, tales como bacterias, virus, parásitos y otros agentes infecciosos capaces de perjudicar severamente nuestro cuerpo y salud al punto de contraer algunas enfermedades.
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¿Cuáles son las enfermedades que adquiere el cuerpo humano si bebe agua de lluvia?
De acuerdo con portales especializados en ciencia y medicina, las afecciones y enfermedades que adquiere el cuerpo humano si bebe agua de lluvia son las siguientes:
- Daño al tracto gastrointestinal. Si el cuerpo bebe agua de lluvia afectaría al sistema gastrointestinal porque puede desencadenar síntomas como diarrea, vómitos, náuseas y malestar estomacal. De igual forma, los microorganismos patógenos en el agua pueden provocar infecciones intestinales y gastroenteritis.
- Afección severa al hígado. Si el cuerpo bebe agua de lluvia también perjudicaría a la salud del hígado. En especial porque algunos contaminantes como productos químicos industriales y pesticidas podrían interferir en su correcto funcionamiento. Si bien, el hígado es el encargado de filtrar las toxinas y sustancias dañinas, en caso de que se exponga a altos niveles de contaminantes, sufre daños y sobrecargas.
- Riesgo en los riñones. Si el cuerpo bebe agua de lluvia, los riñones también sufrirían las consecuencias. Al ser los responsables de eliminar los desechos y mantener el equilibrio de líquidos y minerales, en caso de que dicha agua tenga metales pesados u otros contaminantes, pondría en riesgo su funcionamiento y salud.
- Sistema inmune debilitado. Si el cuerpo bebe agua de lluvia, el sistema inmunológico podría ser afectado. En particular, los microorganismos presentes en el agua provocan respuestas inmunitarias, es decir, activan el sistema inmune para combatir posibles infecciones. Por consiguiente, generarían síntomas como fiebre, inflamación y malestar general.
- Daño al sistema respiratorio. Del mismo modo, el sistema respiratorio se vería afectado si el cuerpo bebe agua de lluvia. Y es que, si el agua está contaminada por partículas de polvo, humo o polen afectaría directamente las vías respiratorias. En este sentido, provocando irritación y dificultades respiratorias.
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