¿Qué es más dañino: un refresco o agua de sabor?

No es una novedad que los refrescos tienen mala fama y al comer fuera de casa, podríamos pensar que el agua de sabor es una opción más saludable para acompañar. No obstante, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) indica que algunas versiones podrían ser más dañinas, lo que nos lleva a preguntarnos si es más dañino un refresco o agua de sabor.

Para determinar qué es más dañino para tu salud, si un refresco o agua de sabor, primero hay que definir en qué consiste esta última.

El agua de sabor tiene dos vertientes: la que es elaborada con frutas y la que es saborizada que contiene derivados vegetales o frutales, mismos que pueden ser polvos, jarabes o concentrados que, una vez mezclados con agua natural, se logra una bebida con sabor artificial y aunque no lo creas, no es la mejor opción si lo que quieres es hidratarte .

Según la Profeco, estas últimas además de tener grandes cantidades de azúcar, conservadores y colorantes, igualmente son elaboradas con edulcorantes; es decir, un sustituto del azúcar refinada que le brinda un sabor dulce a ciertas bebidas o alimentos. De modo que, un refresco o agua de sabor serían igual de dañinos.

Si bien, las bebidas con edulcorantes tienen menos calorías que los refrescos, se asocia con problemas cardíacos, problemas de salud intestinal, riesgo de padecer síndrome metabólico y lastimar la salud dental.

Aunque la Profeco no específica que un refresco o agua de sabor sean igual de dañinos, por lo menos describe que las aguas saborizadas contienen varios ingredientes que ponen en riesgo la salud en caso de ser consumidas habitualmente en exceso.

Por su parte, Harvard aconseja mantener distancia de un refresco o agua de sabor, ya que las dos opciones forman parte de su listado de bebidas azucaradas que tiene algún tipo de edulcorante, cuyo consumo está relacionado con varias afectaciones de salud.

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