Nadie se salva del famoso “mal del puerco”, es decir, la sensación de sueño después de la comida. Estas ganas de dormir son tan intensas que puedes comenzar a bostezar y cabecear frente a la televisión. Sin embargo, este fenómeno es más común de lo que parece, según los expertos, y aquí descubrirás por qué se origina y los efectos que tiene sobre tu salud.
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¿Qué dicen los investigadores sobre el sueño después de la comida?
A pesar del mito que sugiere que al comer toda la sangre viaja al sistema digestivo para promover la digestión y absorción de nutrientes, este proceso es más complejo. De acuerdo con la profesora Mónica Méndez Díaz de la Facultad de Medicina en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la glucosa en la sangre influye directamente en el sistema nervioso y es uno de los factores que hace posible que nos de sueño después de la comida.
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En este sentido, la glucosa incrementa en la sangre y llega al sistema nervioso en donde reduce la actividad de las células orexinérgicas en el hipotálamo lateral. Dichas células son las responsables de mantenernos despiertos y en alerta. No obstante, al disminuir su actividad por la glucosa, tiene lugar una sensación de tranquilidad que puede llevarnos al sueño después de la comida, especialmente si son alimentos copiosos o muy azucarados.
¿Es malo sentir cansancio después de comer?
Sentir sueño después de la comida no es precisamente señal de un problema de salud. Por el contrario, se trata de un estado fisiológico natural que se estabiliza cuando los niveles de glucosa se normalizan y las neuronas del hipotálamo retoman su actividad habitual. Además, el aumento de glucosa provoca la liberación de insulina por el páncreas, que a su vez favorece la producción de serotonina y melatonina, neurotransmisor y hormona respectivamente que generan somnolencia.
No obstante, si el cansancio después de comer es recurrente o muy intenso, la Secretaría de Salud de México recomienda a la ciudadanía a consultar a un especialista para descartar cualquier trastorno subyacente.
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