Cuando estamos en una discusión, elegir las palabras correctas es fundamental para mantener la calma y evitar escalar el conflicto. De este modo, usar la primera persona al discutir facilita una comunicación honesta y ayuda a que ambas partes se sientan respetadas y comprendidas; sin embargo, tienes que saber que se trata de una técnica avalada por psicólogos que promueve un ambiente de colaboración y empatía al expresar pensamientos y emociones sin culpar directamente al otro.
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¿Cuáles son los beneficios de usar la primera persona al discutir?
Usar la primera persona al discutir permite expresar nuestras emociones sin que la otra persona se sienta atacada. Por lo que, en vez de decir “tú nunca escuchas”, podemos optar por “me siento ignorado cuando no me escuchas”, lo cual reduce la sensación de acusación. Esta forma de comunicación ayuda a que la conversación sea más constructiva y evita la defensiva en la otra persona, abriendo así el espacio para un diálogo sincero.
Hablar desde la primera persona también ayuda a centrarse en nuestros sentimientos y a transmitirlos de manera respetuosa, lo que crea un ambiente de comprensión y vulnerabilidad. De esta forma, ambas partes pueden exponer sus necesidades sin entrar en una dinámica de confrontación o competencia.
¿Qué más decir para evitar malentendidos al discutir?
Otra razón para usar la primera persona al discutir es que este enfoque promueve la empatía en la conversación. Frases como “me hace sentir frustrado cuando sucede esto” en lugar de “tú siempre haces lo mismo” permiten que la otra persona entienda cómo nos afecta su comportamiento, sin sentirse obligada a defenderse. Esto, en última instancia, facilita una resolución más rápida y armoniosa del conflicto.
La próxima vez que te encuentres en una discusión, considera usar la primera persona al discutir tus sentimientos y pensamientos. Este sencillo cambio puede ser clave para transformar una situación tensa en una oportunidad de fortalecer el vínculo con la otra persona, ya que evita malentendidos y mejora la calidad de la comunicación.
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