La pensión por fallecimiento es una prestación que otorga el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a los beneficiarios de un trabajador asegurado que haya cumplido con ciertos requisitos. Su objetivo es proporcionar apoyo económico a las personas que dependían del empleado tras su fallecimiento, garantizando su bienestar y estabilidad financiera. A continuación, te cuento quiénes tienen derecho a recibirla y cuáles son los requisitos necesarios para acceder a ella.
¿Quién puede recibir la pensión de un fallecido?
De acuerdo con la Ley del Seguro Social y el artículo 501 de la Ley Federal del Trabajo, los beneficiarios directos de la pensión por fallecimiento son principalmente el cónyuge o concubino, los hijos y, en algunos casos, los padres del trabajador asegurado. Para que estas personas tengan derecho a ella, deben cumplir con ciertos requisitos.
En el caso de la viudez, tanto el esposo o esposa como las parejas en concubinato pueden solicitar la pensión, siempre que acrediten su relación con el trabajador y su dependencia económica. Además, los hijos del asegurado también tienen derecho, siempre que sean menores de 16 años o tengan máximo 25 años y se encuentren estudiando, y que no estén cubiertos por el régimen obligatorio del IMSS.
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¿Qué se necesita para cobrar una pensión por fallecimiento?
Para que los beneficiarios puedan acceder a la pensión por fallecimiento, el trabajador asegurado debe haber cotizado al menos 150 semanas al IMSS, salvo que su muerte haya sido consecuencia de un riesgo laboral. En estos casos, se requiere un dictamen que certifique que el fallecimiento fue producto de un accidente o enfermedad laboral.
Si el fallecido tenía hijos con discapacidad permanente o enfermedad crónica, la pensión puede extenderse hasta que la incapacidad desaparezca, siempre que se cumpla con el requisito de las 150 semanas de cotización o el dictamen correspondiente en caso de accidente laboral. En ausencia de cónyuge o hijos, los padres del trabajador fallecido pueden recibir la pensión siempre que demuestren dependencia económica y vínculo familiar.
El proceso para solicitar la pensión incluye la presentación de la Designación de Beneficiarios ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, así como la entrega de documentos que acrediten el parentesco y la dependencia económica.
Además, los beneficiarios tienen derecho a otras prestaciones laborales, como salarios pendientes, prima vacacional, aguinaldo y ayuda para gastos funerarios, siempre que cumplan con las condiciones requeridas. Para recibir orientación en el proceso, los receptores pueden acudir al IMSS o a la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET) para asesoría legal.
