Por culpa de unas señoras morosas, ya no le quieren prestar a Paola
Paola sólo es culpable de haber querido ayudar a las señoras y a su cuñado. Ellas saben que si piden prestado, lo tienen que pagar porque se comprometieron.
Paola sólo es culpable de haber querido ayudar a las señoras y a su cuñado. Ellas bien saben que si piden algo prestado, lo tienen que pagar; si no les alcanza, no es problema de Paola. Ahora, a Paola no le quieren prestar por culpa de las morosas.
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