¡Que no se queje! La pareja de Paco sabía que le gusta la hierba
Paco revela que Carolina siempre supo de de su vicio, pues es un estilo de vida que le genera tranquilidad. Si Carolina no compra su hierba, él la busca.
A Paco no le pesa cuidar a su hija, pero Carolina, su pareja, es una encajosa: hasta un vaso de agua le pesa agarrar. Paco revela que Carolina siempre supo de de su vicio, pues es un estilo de vida que le genera tranquilidad. Si Carolina no compra su hierba, él la tiene que buscar. Lo que más le molesta a Paco es que Carolina no pide las cosas ‘por favor’ y su hija ya es igual de mandona.
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