En la noche del 31 de octubre, los disfraces y las calabazas se apoderan de las calles. Es la noche de Halloween, una festividad que ha ganado popularidad en los últimos años. Pero, ¿por qué se acostumbra usar calabazas en Halloween? ¿Cuál es el origen de esta tradición?
Para entenderlo, debemos remontarnos a los antiguos celtas, quienes celebraban el Samhain, una festividad que marcaba el final del verano y el comienzo del invierno. Durante esta época, se creía que los espíritus de los difuntos regresaban a la Tierra y se mezclaban con los vivos. Para ahuyentar a estos espíritus malignos, los celtas tallaban rostros aterradores en nabos y los colocaban cerca de las puertas de sus hogares.
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Con la llegada del cristianismo, el Samhain se fusionó con la festividad del Día de Todos los Santos, que se celebraba el 1 de noviembre. Esta fusión dio origen a la celebración conocida como Halloween, que significa “noche de Todos los Santos”. A medida que esta festividad se extendió por Europa, los nabos fueron reemplazados por calabazas, ya que eran más abundantes en el continente.
¿Qué tiene que ver la calabaza con Halloween?
Entonces, ¿por qué se usa específicamente una calabaza? La respuesta se encuentra en una antigua leyenda irlandesa. Según esta historia, un hombre llamado Jack, conocido por su maldad y su astucia, engañó al diablo en varias ocasiones. Cuando murió, no pudo entrar ni al cielo ni al infierno, por lo que quedó condenado a vagar eternamente por la oscuridad. El diablo, en un acto de misericordia, le dio un carbón encendido para que iluminara su camino. Jack talló un nabo y colocó el carbón dentro, convirtiéndolo así en una linterna. Desde entonces, Jack O’Lantern, como se le conoce, vaga por el mundo en busca de un lugar donde descansar.
Esta leyenda popularizó el uso de las calabazas talladas en Halloween. Hoy en día, es común ver calabazas con rostros aterradores iluminando por las noches. Los niños y adultos disfrutan de la tradición de tallar sus propias calabazas, creando diseños únicos y originales. Es una actividad divertida que fomenta la creatividad y el espíritu festivo.
Además de su simbolismo, las calabazas también tienen un papel importante en la gastronomía de Halloween. Se utilizan para preparar deliciosas recetas como la famosa tarta de calabaza o el tradicional puré de calabaza. Estos platos son un verdadero deleite para el paladar y una forma deliciosa de aprovechar esta fruta de temporada.
En pocas palabras, el uso de calabazas en Halloween es una tradición que se remonta a los antiguos celtas y que ha perdurado a lo largo de los siglos. Estas frutas talladas y decoradas con velas representan una forma de ahuyentar a los espíritus malignos y dar la bienvenida a los buenos. Además, las calabazas también nos brindan la oportunidad de disfrutar de deliciosos platos típicos de esta festividad. Así que la próxima vez que veas una calabaza iluminada en Halloween, recuerda su historia y disfruta de esta divertida tradición. ¡Feliz Halloween!