En medio de la vasta metrópoli que es la Ciudad de México y el Estado de México, surge una pregunta apremiante: ¿Hasta cuándo podrá sostenerse la fuente vital que abastece a millones?
La crisis del agua ha alcanzado su punto más crítico en la historia de ambas entidades, y el Sistema Cutzamala, principal proveedor de dicho líquido para la zona, enfrenta un colapso inminente, exacerbado por la escasez de lluvias.
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¿Cómo está afectando la sequía a las presas del Sistema Cutzamala?
Según el último informe de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las tres presas del Sistema Cutzamala - El Bosque, Valle de Bravo y Villa Victoria - que alimentan el 25% del abasto en la Zona Metropolitana del Valle de México, han experimentado una disminución del 37% en su capacidad ordinaria. Además, el Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México (OCAVM), de Conagua, advirtió que el nivel actual de los embalses se encuentra en 39.8%.
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Sequía a nivel nacional:
En un mes marcado por una sequía persistente, el país ha registrado un 24.5% menos de lluvia de lo habitual. Este déficit se refleja en el nivel de llenado de las 210 principales presas a nivel nacional, que actualmente se encuentra en un 51%, un punto porcentual menos que la semana anterior.
¿Cuánto tiempo queda para que el agua del Sistema Cutzamala se agote?
La urgencia de la situación ha dado paso al temido “Día Cero”, un término que describe la fecha en la que las reservas de agua alcanzan niveles críticos, obligando a las autoridades a cortar el suministro a hogares y empresas, reservando el líquido vital solo para servicios esenciales.
En el Valle de México, el OCAVM ha establecido el 26 de junio como la fecha límite antes de que el sistema colapse, con la esperanza de una recuperación que inicie en septiembre.
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Estimaciones de la ONU sobre el Día Cero del Sistema Cutzamala:
Sin embargo, las estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas plantean un panorama sombrío si no se toman medidas inmediatas. Según la ONU, el día cero definitivo, donde la capital se quedaría sin agua por completo, podría llegar en 2028 si no se implementan medidas urgentes para mejorar la captación y distribución de los recursos hídricos.