Esta semana en Exatlón México, la tensión estuvo a flor de piel, ya que las mujeres se vieron expuestas a un riesgo inminente de eliminación al ser las participantes más vulnerables en la Zona de Peligro . Como cada semana, los participantes luchan con todo su esfuerzo para evitar caer en este peligroso escenario, pero esta vez, el formato del juego lo hacía aún más difícil para las competidoras.
La Zona de Peligro se activó esta vez debido a que una mujer de los dos equipos, rojo y azul, sería la que perdería todas sus vidas durante las pruebas y, por lo tanto, quedaría automáticamente en la cuerda floja para ser eliminada. En este contexto, la competencia no solo estaba marcada por la habilidad y resistencia en los circuitos, sino también por la estrategia de cada equipo para salvar a sus jugadoras más fuertes y enviar a una rival al temido duelo de eliminación .
El equipo azul, al ser consciente de la importancia de mantener a sus mejores jugadoras en la contienda, ideó una estrategia para salvar a su compañera Analu. Esta decisión resultó en que, al final de la jornada, las mujeres del equipo rojo se quedaron en desventaja, dejando a Ingrid como la más débil en el circuito. Al perder sus vidas en las pruebas, Ingrid quedó automáticamente en la Zona de Peligro, convirtiéndose en la siguiente participante en riesgo de eliminación.
Este giro inesperado demuestra cómo, en Exatlón México , cada jugadora debe enfrentarse a desafíos tanto físicos como estratégicos, donde no solo importa la destreza individual, sino también la habilidad para manejar las dinámicas del juego en equipo. Ingrid, al perder en el circuito, se verá obligada a enfrentarse a la posibilidad de ser eliminada, mientras sus compañeras de equipo seguirán luchando por mantener su lugar en la competencia.
