En Café con Aroma de Mujer, Gaviota le pregunta a Marcía por el paradero de Wilson. Pivisay y Aurelio festejan su matrimonio en el bar de don Pedro, y Leonidas aprovecha para informarles que le ofrecieron trabajo en África y que viajará con Margarita. Gaviota, decidida, toma un taxi a la terminal de transporte para buscar a Wilson. Inicia la audiencia de imputación de cargos; Sebastián se declara inocente, pero la fiscal presenta las pruebas que lo inculpan. Gaviota finalmente encuentra a Wilson e intenta convencerlo de declarar a favor de Sebastián. Margarita, agradecida por la nueva vida que empezará, va a la iglesia del pueblo y ora por su hijo.
Wilson acepta declarar y va a la fiscalía con Gaviota. Ante la juez confiesa los negocios entre Iván, Pablo Emilio y su patrón, y explica cómo comenzaron a lavar dinero. Además, responsabiliza a Carlos Mario del intento de secuestro de Octavio y del asesinato de Javier, y aporta como pruebas los chats que cruzó con su patrón, donde quedan en evidencia las órdenes que recibía. A Don Pedro se le ocurre una idea para evitar que su hijo huya del pueblo; Carlos Mario va al bar y conversa con su papá, quien le pide disculpas por la crianza que le dio.
Mientras Sebastián es declarado inocente, Iván pierde su libertad. Leonidas y Margarita evitan que Carlos Mario salga del bar, y este es capturado por la policía. La joven recibe un disparo a la altura del hombro. Lucrecia se despide de Iván y le informa que se irá del país. Pablo Emilio también es capturado en su oficina. Julia cita a Gaviota en la sala de juntas de Café Élite, le agradece por todo lo que hizo por Sebastián, y le informa que le otorgará a su nieto Fernando el veinticinco por ciento de la herencia que le corresponde.
