En Café con Aroma de Mujer, Lucía insiste en pedirle perdón a Sebastián antes de irse de Colombia. Lucrecia le sugiere que retracte su declaración. Mientras Iván hace maletas para huir del país, recibe una llamada de Café Élite; la secretaria le informa que fue citado por la fiscalía para ampliar su declaración. Sebastián llama a Gaviota y le dice que necesita organizar su vida y la de Fernando, pues presiente que será declarado culpable.
Lucrecia logra vender la casa y planea usar el dinero para su viaje a Italia. Julia va al gastrobar y conversa con Marcela; le cuenta los motivos que la llevaron a abandonar su sueño de ser chef, e intenta convencerla de no abortar. La fiscal llama a Iván y le comunica que la ampliación de su declaración es obligatoria y presencial. Marcela decide tener a su bebé y se reconcilia con Lemarcus. El papá de Carlos se presenta ante Julia; aprovecha para explicarle su experiencia de vida como padre, y le hace comprender que la homosexualidad es algo normal en la vida de sus hijos.
Lucía le informa a Iván que no ampliará su declaración en contra de Sebastián. Julia les pide perdón a Marcela y a Bernardo, y le agradece a Lemarcus todo lo que ha hecho. Marcia y Wilson llegan a la terminal de transporte de Bogotá, pero, recordando las palabras de Gaviota, ella desiste de viajar. Iván va a la fiscalía y amplía su declaración; a la salida se encuentra con su familia, y Julia lo obliga a quedarse en la imputación de cargos de Sebastián. Aurelio y Pivisay se casan en la iglesia del pueblo. Marcia declara presencialmente ante la fiscal, pero sus palabras no son suficientes, pues no tiene una prueba formal que las sustente.