La tos ferina, también conocida como tosferina o coqueluche, ha vuelto a ser motivo de preocupación a nivel mundial. Esta enfermedad respiratoria altamente contagiosa, causada por la bacteria Bordetella Pertussis, ha experimentado un aumento significativo en el número de casos en diversas regiones.
Alertan por aumento de casos de tos ferina
La Organización Panamericana de la Salud ha emitido una alerta epidemiológica debido al incremento de casos de tos ferina a nivel global. Después de una disminución durante la pandemia de COVID-19 , varios países han reportado un repunte en 2024, incluyendo Brasil, México, Perú y Estados Unidos. En Europa, también se ha observado un aumento significativo desde finales de 2023.
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Esta tendencia preocupante se atribuye principalmente a la disminución en la cobertura de vacunación contra la difteria, el tétanos y la tos ferina (DTP), especialmente durante el período de la pandemia. En 2021, la cobertura de la primera y tercera dosis de esta vacuna en las Américas alcanzó su nivel más bajo en dos décadas.
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¿Qué es la tos ferina?
La tos ferina es una infección respiratoria altamente contagiosa causada por la bacteria Bordetella Pertussis. Aunque puede afectar a personas de todas las edades, es particularmente peligrosa para los bebés y niños pequeños. La enfermedad se caracteriza por episodios de tos intensa y prolongada, que a menudo terminan con un sonido distintivo similar a un silbido o “gallo”, de ahí su nombre en inglés “whooping cough”.
¿Cuáles son los síntomas de la tos ferina?
Por otra parte, los síntomas de la tos ferina suelen aparecer entre 7 y 10 días después de la infección. Inicialmente, pueden confundirse con un resfriado común e incluyen:
- Fiebre leve.
- Secreción nasal.
- Tos seca.
A medida que la enfermedad progresa, la tos se vuelve más intensa y característica, con episodios que pueden durar varias semanas. Los ataques de tos pueden ser tan severos que causan vómitos, dificultad para respirar y agotamiento.
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¿Qué hacer para evitar contagiarte de tos ferina?
Cabe destacar que la prevención es fundamental para controlar la propagación de la tos ferina. En este sentido, la OPS recomienda las siguientes medidas:
- Asegurar una cobertura de vacunación DTP superior al 95% en niños, con las tres dosis recomendadas.
- Vacunar a trabajadores de la salud, especialmente aquellos en maternidades.
- Vacunar a mujeres embarazadas para proteger a los recién nacidos.
- Fortalecer la capacidad de diagnóstico en laboratorios para mejorar la detección y caracterización de brotes.
