En el Centro Histórico de Puebla , durante la tarde del 13 de agosto, vendedores ambulantes y policías municipales protagonizaron escenas de persecución y una batalla campal donde varias personas resultaron lesionados.
En imágenes registradas por testigos, y que posteriormente se difundieron por medio de las redes sociales, se puede observar cómo se desplegó un fuerte operativo por parte de los uniformados, para detener el comercio ambulante que se instaló en días recientes en las principales calles turísticas de la capital poblana. Ante la inconformidad de los comerciantes, del diálogo pasaron a los insultos y, posteriormente, a los golpes.
Entre las grabaciones se muestran agresiones en el interior de locales establecidos, donde un joven golpea salvajemente a una persona que está indefensa en el suelo. También hay persecuciones por las calles y la toma de un oficial con fuertes impactos en el rostro. Además, en los metrajes que circulan en la red se evidencia lo advertido previamente por los vendedores ambulantes, que defenderían su espacio con su vida.
¿Qué detonó el salvaje enfrentamiento?
De acuerdo a datos preliminares, este enfrentamiento se perpetró después de que los agentes de seguridad desplegaron un fuerte operativo en la avenida 8 Poniente, entre las calles 5 de Mayo y 3 Norte, después de que comerciantes ambulantes trataron de reinstalarse en la zona, la cual, habían dejado durante el fin de semana después de presuntamente llegar a un acuerdo con las autoridades municipales, quienes, supuestamente, les permitirían trabajar de lunes a viernes; sin embargo, la ‘promesa’ de lugares no se cumplió.
Ante esta situación, un sector de los afectados decidió implementar una marcha rumbo al palacio municipal para realizar una protesta y defender su oficio, mientras que otros más se negaron a quitar sus puestos, lo que provocó que al no encontrar solución en el diálogo, los ánimos se calentaran y terminaran protagonizando una gresca.
Tras el despliegue de los uniformados, algunos ciudadanos y elementos resultaron lesionados, por lo que las investigaciones continúan. Por su parte, los comerciantes se comprometieron a no agredir a la autoridad, pero advirtieron que se seguirán defendiendo en caso de ser necesario.