Con violencia y represión, Nicolás Maduro se aferra al poder en Venezuela
Nicolás Maduro quiere estar en un tercer periodo como dictador de Venezuela; emprendió una cacería contra Edmundo González, candidato de la oposición.
Desde el 5 de marzo de 2013 hasta los primeros días de 2025, Nicolás Maduro ha consolidado su figura como el dictador de Venezuela, gobernando con una mano de hierro y desafiando a cualquier oposición.
Su permanencia en el poder se ha sostenido a través de tácticas de represión y amenazas, particularmente durante la reciente campaña presidencial de 2024, donde advirtió que habría un “baño de sangre” si ganaba Edmundo González Urrutia , candidato a la presidencia de Venezuela por parte de la oposición.
Nicolás Maduro, en un discurso lleno de retórica belicosa, afirmó: “El destino de Venezuela en el siglo XXI depende de nuestra victoria el 28 de julio. Si no quieren que Venezuela caiga en un baño de sangre, en una guerra civil fraticida, producto de los fascistas, garanticemos el más grande éxito, la más grande victoria de la historia electoral de nuestro pueblo”.
Maduro tiene “cero legitimidad”: María Corina Machado
Casi 8 millones de personas han abandonado Venezuela: ONU
El panorama actual en Venezuela es desolador. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Migración, aproximadamente 7.89 millones de venezolanos han abandonado su país, buscando mejores condiciones de vida en naciones vecinas como Colombia, Brasil, Perú, Chile y Ecuador.
De estas personas, el 90% se encuentra en edad laboral, lo que refleja una crisis humanitaria y económica sin precedentes, exacerbada por la hiperinflación que afectó al país entre 2017 y 2021.
Casi 8 millones de personas abandonaron Venezuela por la dictadura
Nicolás Maduro iniciará un nuevo régimen el 10 de enero
A pesar de la represión, la oposición en Venezuela ha logrado movilizar a la población, despertando un letargo social que se ha mantenido desde 1999.
En medio de estos acontecimientos, Maduro se prepara para tomar posesión nuevamente como líder, lo que plantea la interrogante de si permitirá una transición política en un país que clama por un cambio.
Mientras el
10 de enero
se acerca, el futuro de Venezuela pende de un hilo. La comunidad internacional observa con atención, cuestionando si el régimen de Maduro puede resistir las crecientes demandas de una población cansada de la opresión y deseosa de libertad.