El año pasado, una teoría apocalíptica que se volvió viral relacionada con la tormenta solar y los supuestos riesgos a la humanidad, la cual representó miles de cuestionamientos alrededor del mundo, ya que suponía la extinción de nuestra civilización debido a la radiación desde nuestra estrella.
Un año después, la tormenta solar está de vuelta y ahora ha sido catalogada de magnitud G4 , la segunda más intensa de la clasificación y que podría generar varios efectos en la Tierra, aunque no de la manera catastrófica, como se ha informado en redes sociales. Por este motivo, a continuación te decimos de qué trata este fenómeno.
La ciencia ha explicado en numerosas ocasiones que dentro de millones de años, antes de apagarse, el Sol se expandirá a tal magnitud que consumirá planetas, con la Tierra incluida y que podría ser el detonante de nuestra extinción; sin embargo, para esto la civilización que conocemos no será reconocible y se ve remotamente lejano, pero no es la única teoría relacionada con nuestra gran estrella que podría terminar con nosotros.
Ahí entran las tormentas geomagnéticas, conocidas coloquialmente como tormentas solares, las cuales ocurren de manera súbita y que tiene su origen en la superficie del Sol, con erupciones solares y eyecciones de masa coronal.
¿Qué son las tormentas solares?
Básicamente, una tormenta solar es el nombre que recibe el fenómeno de cuando el Sol emite una gigantesca cantidad de partículas y radiación electromagnética, al grado de interactuar inusualmente con la atmósfera de la Tierra, en especial con nuestro campo magnético, lo que puede producir alteraciones fulminantes en la vida, principalmente con el colapso de tecnologías.
Este tipo de fenómenos existen y han ocurrido en varias ocasiones, aunque ninguna tan grande como la teoría más catastrófica . La última gran tormenta solar ocurrió en 1859, fue nombrado como el “Evento Carrington” en honor al descubridor y afectó “solamente” al telégrafo en las líneas de Europa y Norteamérica.
Estas tormentas geomagnéticas parten principalmente de erupciones solares, corrientes de viento solar y las conocidas “eyecciones de masa coronal”, las cuales describe National Geographic como “liberaciones masivas de plasma y campos magnéticos del Sol”. Debido a la intensidad de estas, repercuten en todos los planetas que orbitan a su alrededor.
¿Cómo afecta una tormenta solar a la Tierra?
Según informa la revista científica , “cuando estas partículas y radiación llegan a la Tierra, pueden interactuar con el campo magnético terrestre y causar una variedad de efectos”, entre los que destacan las alteraciones a las redes eléctricas y las comunicaciones, además de auroras en latitudes altas y bajas.
El escenario más catastrófico coloca a las tormentas solares como las causantes de incendios forestales masivos que cubran en una intensa capa a la Tierra, además de la destrucción de satélites que acabarían con la comunicación global, algo que todavía no ocurre, pero que tampoco se puede descartar por completo.
Ahora, en este 2024, la tormenta solar G4 ha provocado que se formen auroras boreales en el hemisferio norte, gracias a la protección de la atmósfera que protege a la Tierra de estas erupciones.