En medio de la frágil tregua entre Israel y Hamás, se llevó a cabo un nuevo intercambio de prisioneros y rehenes. En esta ocasión, ocho rehenes fueron liberados, incluidos tres israelíes y cinco ciudadanos tailandeses; sin embargo, la entrega estuvo marcada por la violencia y el desorden, especialmente en la Franja de Gaza, donde dos rehenes israelíes sufrieron momentos de extrema tensión.
Caos en el último intercambio de rehenes entre Israel y Hamás
El peor episodio lo vivió Arbel Yehoud, de 29 años, quien estuvo a punto de no salir de Gaza debido a que una multitud furiosa la rodeó en Jan Yunis. Sorprendentemente, los mismos militantes de Hamás tuvieron que intervenir para protegerla de la turba.
Otro caso impactante fue el de la soldado Agam Berger, de 20 años, quien no solo fue obligada a posar ante las cámaras para fingir que estaba en buen estado, sino que sus captores le entregaron un “diploma” y regalos antes de su liberación.
Por otro lado, el ciudadano israelí Gadi Moses, de 80 años, y los cinco ciudadanos tailandeses fueron liberados sin incidentes.
Israel retrasó la liberación de prisioneros palestinos
El Gobierno israelí retrasó la liberación de 110 prisioneros palestinos, argumentando fallos en la seguridad durante el intercambio. Entre los liberados se encontraban 23 reos condenados a cadena perpetua.
Al respecto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió que cualquier daño a los rehenes tendría consecuencias severas: “Quien se atreva a dañar a nuestros rehenes pagará el precio."No obstante, horas después, la orden de excarcelación se ejecutó, permitiendo la salida de los detenidos palestinos como parte del acuerdo de cese al fuego temporal.
El infierno del cautiverio: Un último vistazo al horror
A pesar de la liberación, los rehenes israelíes han descrito condiciones inhumanas durante su cautiverio. Para muchos de ellos, este canje representa la primera vez en meses que han estado fuera del “infierno” del secuestro.
La situación sigue siendo volátil, y la comunidad internacional mantiene la esperanza de que más rehenes sean liberados en las próximas negociaciones.
