La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que los edulcorantes, o sustitutos de azúcar, no son efectivos para bajar de peso a largo plazo y pueden tener efectos indeseados si se usan por mucho tiempo, como el aumento del riesgo de diabetes de tipo 2, de enfermedades cardiovasculares y de mortalidad en adultos.
No es aliado para bajar de peso
Muchos abrazamos la llegada de los edulcorantes sin calorías o prácticamente sin ellas, confiando en que finalmente eran un coadyuvante eficaz en contra del excesivo consumo de las mismas, y por lo tanto un aliado para bajar de peso, pero esta creencia no es del todo acertado.
Buena alternativa para personas diagnosticadas con diabetes
Si bien es cierto que para las personas diagnosticadas con diabetes estos sustitutos de azúcar no azucarados representan una buena alternativa para seguir disfrutando el gusto por lo dulce sin consecuencias para su salud, para el resto de la población los edulcorantes no aportan prácticamente nada, ni beneficios, ni perjuicios.
ONU no aconseja consumirlos por mucho tiempo
Por ello, la OMS desaconsejó su uso y señaló que, en general, la gente debe reducir el dulce de su dieta, y debe hacerlo desde edades tempranas para gozar de una mejor salud.
Tomar agua natural la mejor opción
Los autores del estudio, como otros expertos, reafirman que las comidas no edulcoradas y el consumo de agua, por sobre los refrescos, siguen siendo la mejor opción.
“reemplazar los azúcares libres (los refinados y los naturales presentes en las frutas, miel y otros) por sustitutos de azúcar no ofrece ningún beneficio a largo plazo en términos de reducción de grasa en el cuerpo en adultos o niños”, aseguró la organización rectora de la salud pública a nivel global.
Estos son los productos que no se aconsejan
Entre los productos específicos que se desaconsejan figuran el acesulfamo K, aspartamo, advantame, ciclamatos, neotame, sacarina, sucralosa, así como la stevia y sus derivados.
“No hay pruebas suficientes para evaluar de forma definitiva los beneficios, en particular, los posibles efectos a largo plazo de los edulcorantes no azucarados. Puede que haya un pequeño efecto sobre el peso a corto plazo, pero no tenemos datos de alta calidad que lo confirmen a largo plazo. Eso sí, “tampoco tenemos pruebas consistentes de impactos negativos destacables para la salud”. Joerg J. Meerpohl, investigador del Instituto para la Evidencia en Medicina de la Universidad de Friburgo (Alemania) y autor principal del estudio.
Investigación en proceso
Esta investigación no es concluyente y solamente debe considerarse como el punto de partida para una guía sobre los edulcorantes no azucarados que la OMS está preparando y que será presentada este año.
La metodología para la realización del estudio incluyó la revisión de 56 publicaciones y estudios científicos previamente realizados, en los que se habían analizado el impacto positivo o negativo sobre diferentes aspectos de la salud de algunos edulcorantes, comparándolos con azúcar o un placebo, incluyendo a personas sanas, adultos, niños y población en general con sobrepeso.
“la gente necesita considerar otras maneras de reducir el consumo de azúcares libres, como consumir alimentos que naturalmente contienen azúcares, como las frutas; o alimentos y bebidas que no sean dulces”, indicó el director de nutrición y seguridad de los alimentos de la OMS, Francesco Branca.
Esta recomendación se aplica a toda las personas, excepto a aquellos con diabetes preexistente.
La nueva recomendación incluye edulcorantes naturales
Asimismo, la OMS señaló que esta nueva recomendación incluye edulcorantes sintéticos, naturales o que hayan sido modificados, “que no estén clasificados como azúcares que se encuentran en las bebidas y alimentos industriales” o que sean vendidos por separado para ser agregados por el consumidor.
La organización aclaró que su posición en relación a los sustitutos de azúcar no se aplica a productos de cuidado o higiene personal que los puedan contener, como pastas de dientes, cremas para la piel o medicamentos.
Tampoco implica a los azúcares bajos en calorías o alcoholes de azúcar, ya que éstos son derivados del azúcar y contienen calorías, por lo que no se les considera edulcorantes.
Este conjunto de recomendaciones está basado en las conclusiones de la revisión de evidencia científica y forma parte de los esfuerzos de la OMS para que los países adopten políticas que favorezcan hábitos de alimentación saludables y dietas de calidad, lo que reduce el riesgo de sufrir enfermedades crónicas.