En el estado de Veracruz, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) desplegó a más de 200 militares del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, con el objetivo de reducir los índices de violencia.
La dependencia informó que con los 219 militares desplegados se llevarán a cabo operaciones en apoyo a las autoridades estatales y locales de diversos municipios de Veracruz.
Más de 200 militares llegan a municipios violentos de Veracruz
“Con el propósito de seguir impulsando las acciones directas y decisivas que se han estado realizando en contra de los infractores de la ley en los municipios más afectados por las actividades delictivas”, destacó la Sedena.
Añadió que con estas acciones, la Sedena “refrenda su compromiso de velar y salvaguardar el bienestar de los ciudadanos y en ésta ocasión en el Estado de Veracruz, a fin de coadyuvar a garantizar la paz y seguridad de los mexicanos”.
EJÉRCITO REFUERZA SEGURIDAD EN ESTADOS DEL PAÍS
El 25 de junio pasado, la Sedena informó que envió 1,000 militares pertenecientes a las Unidades de Fuerzas Especiales del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos a la localidad de Cerocahui, municipio de Urique, Chihuahua, con el objetivo es inhibir las actividades de la delincuencia organizada y atender la problemática de seguridad en ese municipio.
Estas unidades integrarán una Fuerza de Tarea Regional para realizar la planeación y trabajos de inteligencia que fortalezcan el Estado de derecho en la entidad y llevar a cabo reconocimientos terrestres y disuasivos a inmediaciones de Cerocahui, Bahuichivo, Mesa de Arturo, Ciénega de los Trejos y Piedras Verdes, así como en la zona serrana del estado de Chihuahua.
Militares en apoyo de autoridades locales para seguridad: Sedena
Mientras que en febrero pasado un total de 500 militares de la Sedena llegaron a Nuevo León con el objetivo de integrarse al operativo Monterrey Seguro 2022; los soldados reforzaron las acciones de vigilancia en la capital de la entidad.
El acuerdo de vigilancia también incluyó proporcionar apoyo a la policía municipal de Monterrey, a Fuerza Civil y a la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León . De acuerdo con las autoridades, con la integración de los militares se buscó bajar los índices delictivos que se registraban en ese momento en la zona metropolitana.