San Pedro de la Laguna, “La cuna de la pirotecnia” que enciende las fiestas mexicanas
La tradición de la pirotecnia tiene sus raíces en el pueblo mexiquense de San Pedro de la Laguna, donde se combina arte y tradición desde hace más de 170 años.
San Pedro de la Laguna, en Zumpango, Estado de México, es reconocido como “La Cuna de la Pirotecnia”, donde mechas, fuegos artificiales, pólvora, castillos y estruendos salen para llenar de color y tradición las festividades mexicanas .
Este pequeño pueblo ha mantenido viva por más de 170 años una herencia artesanal que combina arte y tradición, y que en estos tiempos modernos, se realiza con estricta seguridad.
San Pedro de la Laguna: raíces de pólvora y fuego
Abril Decaro, bisnieta de los pioneros pirotécnicos Lucio Decaro y Víctor Adán, relata el origen de este arte. “Mi bisabuelo Lucio Decaro creó los castillos de torre, mientras que Víctor Adán fue pionero en la fabricación del cohetón”, comenta, destacando la innovación que sus antepasados aportaron a la pirotecnia nacional.
Claudia Enciso, comerciante local, explica que esta tradición comenzó en 1850 con las familias Decaro, Ávila y Zamora. “Ahora los Záyago y Enciso Záyago seguimos con los polvorines, donde molemos la base para los cohetes”, menciona mientras muestra el emblemático “torito”, símbolo de los pioneros pirotécnicos.
La Seguridad, un pilar fundamental en la tradición de la pirotecnia
La pirotecnia en San Pedro de la Laguna no solo es arte, sino una actividad regulada bajo estrictas normas de seguridad . Silvia Gamboa, con 30 años en el oficio, detalla que cuentan con permisos oficiales otorgados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) y con polvorines supervisados regularmente. Teresa Ávila, otra comerciante, subraya la importancia de medidas como contar con agua, extintores y herramientas, verificadas por autoridades estatales.
Una tradición que une pueblos
Desde 1893, la pirotecnia ha sido un vínculo entre Santa María Tultepec y San Pedro de la Laguna, consolidando su unión en la fe y la festividad. En esta época navideña, el cielo de Zumpango se ilumina con explosiones de color, un testimonio de que esta tradición sigue viva gracias al esfuerzo y dedicación de sus guardianes.
En cada chispa y estallido, San Pedro de la Laguna reafirma su lugar como un baluarte del arte pirotécnico mexicano.