12 de marzo.- Más de una tercera parte de la población mexicana duerme mal y, tan solo en la Ciudad de México, una de cada cuatro personas descansa menos de siete horas por noche, ronca o tiene apnea del sueño, lo que causa daños a su salud como obesidad, hipertensión, falta de memoria y accidentes.
En el marco del Día Mundial del Sueño, que se conmemora el 15 de marzo, la presidente de la Academia Mexicana de Medicina del Dormir, Margarita Reyes Zúñiga, dijo que dormir bien es fundamental para un buen envejecimiento.
Las personas que duermen al menos ocho horas en la noche pueden retrasar hasta 10 años los efectos del envejecimiento, sobre todo en la tercera edad, frente a quienes duermen menos horas.
La privación del sueño es un mal de nuestro siglo debido a los tiempos de traslado tan largos, a los horarios laborales y escolares y especialmente por el uso de dispositivos electrónicos a toda hora que han venido a desplazar este proceso natural, destacó la especialista en psiquiatría.
“Privarnos de sueño es alimentar al monstruo de la enfermedad; hay estudios que demuestran que entre las 20:00 horas y las 6:00 horas es cuando más mensajes de texto envían los adolescentes, y eso significa que no duermen bien”, agregó.